Huesca

CIENCIA

El IEA rinde homenaje a Miguel Catalán, el descubridor de los multipletes cuyo nombre bautiza a tres cráteres de la luna

Una mesa redonda ha analizado la figura de este científico que dio clases en Huesca y con el que se perdió un Premio Nobel a causa de la Guerra Civil

Pilar Catalán, Carlos González, Belén Villacampa y Gabriel Barceló durante la sesión.
Pilar Catalán, Carlos González, Belén Villacampa y Gabriel Barceló durante la sesión.
Pablo Segura

El gran descubrimiento de Miguel Catalán (Zaragoza 1894/Madrid 1957) tuvo lugar hace 100 años. Una noche de intenso trabajo en el que se mantuvo despierto hasta las cinco de la mañana interpretó la configuración electrónica del átomo complejo: con un núcleo y unos electrones corticales alrededor del mismo.

Examinando el espectro del manganeso, determinó que el espectro óptico de átomos complejos contenía grupos de líneas antes desconocidas a los que llamó “multipletes”, entre las que existían regularidades características. Catalán demostró que el estudio de los multipletes llevaba a una mejor comprensión de los estados energéticos de los electrones atómicos.

El Instituto de Estudios Altoaragoneses (IEA) de Huesca ha acogido este martes una mesa redonda desde la que se ha rendido homenaje a este investigador y maestro aragonés en el centenario del descubrimiento de los multipletes, un hallazgo por el que hasta se designaron tres cráteres de la Luna con su nombre.

En la sesión han participado Grabriel Barceló, Físico e Ingeniero Industrial y biógrafo de Miguel catalán, del que fue alumno en el Bachillerato; Carlos González, Coordinador de Formación en Tecnologías del Aprendizaje y el Conocimiento en el IES Miguel Catalán de Zaragoza; y Belén Villacampa, investigadora del Instituto de nanocienia y Materiales de Aragón y profesora de la Escuela de Ingeniería y Arquitectura y de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Zaragoza.

También ha asistido Pilar Catalán, sobrina del homenajeado y directora del Área de Ciencias Naturales del IEA.

Gabriel Barceló ha explicado que Miguel Catalán fue una persona extraordinaria en los estudios que en 1914 y 1915 fue profesor del instituto de Huesca. “Posteriormente le dieron una beca para ir a Londres y allí realizó unos estudios de espectrografía, para determinar a partir de la luz que emite una muestra, en este caso era de manganeso, cuál podía ser la estructura del átomo, que en ese momento se desconocía”, apuntó.

Aquella noche en la que alargó su trabajo hasta bien entrada la madrugada, ha detallado Gabriel Barceló, desarrolló un nuevo procedimiento, el de los multipletes, “que dio lugar al desarrollo de la estructura atómica que hoy día conocemos como la estructura atómica cuántica antigua”.

Tal y como él mismo explicaba a sus alumnos, su descubrimiento de los multipletes, supuso lo mismo que “si un músico oyera una partitura y pudiera interpretar qué instrumento sonaba y cómo estaba construido”.

Y ha asegurado que con Miguel Catalán se perdió un Premio Nobel porque tras la Guerra Civil fue expedientado y se le impidió investigar, y eso hizo que paralizase sus trabajos.

“Esa luz, que ya Newton había estudiado, era por un salto de los electrones al pasar de una capa a otra y, por tanto, existía una relación biunívoca entre el elemento, su espectro, su estructura atómica y la tabla de los elementos”, ha apuntado.

Los tres cráteres en la Luna con su nombre, ha manifestado, obedece a su relevancia internacional. “Es el reconocimiento de su descubrimientos y sobre todo porque también se dedicó a la astrofísica, a determinar el espectro de los distintos planetas y estrellas para conocer el espectro de los elementos del universo”, ha dicho finalmente.