Huesca

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El desempleo de larga duración se agrava con la edad

Las posibilidades de reciclaje y movilidad dificultan su reentrada en el mercado laboral

El Inaem ha convocado subvenciones para desarrollar nuevos programas de formación transversal.
Oficinas del Inaem.
G.A.

La búsqueda de productividad por parte de las empresas, sustituyendo trabajadores veteranos por otros más jóvenes y precarios, más la menor movilidad que tienen los empleados de más edad son dos factores tras el incremento del paro entre las personas de más de 50 años, grupo de edad donde más ha aumentado el desempleo desde la anterior crisis.

“Los jóvenes aportan otros conocimientos, sobre todo tecnológicos, que los mayores no tienen”, indica Inmaculada García, profesora de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza,

Sin embargo, García advierte de que esto puede conllevar en “una sustitución a coste (laboral) más bajo” y una “mayor productividad”, por esa reducción de los costes, “aunque se pierda la experiencia de años” acumulada por los trabajadores más veteranos.

“Un joven es más flexible y adaptable a tareas cambiantes”, y, además, suele tener una mayor movilidad, por lo que dispone de “un mayor horizonte laboral”, señala García, que sin embargo, subraya que los empleados de mayor antigüedad “aportan estabilidad y mayor compromiso porque un joven no sabe si se va a quedar o va a volar”. La profesora de Análisis Económico también resalta que muchos trabajadores que superan la cincuentena siguen trabajando “perfectamente” y tienen en su haber mucha experiencia.

Reincorporación

Unos factores y otros contribuyen a que el paro esté creciendo especialmente entre los más mayores y García advierte de que el desempleo en este grupo es “complicado”, pero que se agrava si, como sucede en no pocos casos, el estar sin trabajo se va alargando en el tiempo.

El paro de larga duración y el de mayores ya son complicados por separado, pero unidos es peor”, evidencia. “El problema del paro de larga duración, y no es lo mismo un año que cuatro, es que (el trabajador) pierde valor. Cuanto más tiempo pasa, más valor pierde y más difícil es encontrar trabajo”, apunta la profesora de Económicas, que señala que este problema se vuelve “más dramático” entre los trabajadores de más de 50 años porque tienen menos posibilidades de reciclaje o movilidad”.

Tal es así que la Administración dispone subsidios hasta llegar a la edad de jubilación para para mayores de 52 que han agotado el paro, “aunque de subsidios no se vive”, recalca García haciendo énfasis en la gravedad del problema.