Huesca

CORONAVIRUS

“Resignación” en la hostelería tras una Navidad a medio gas

El sector reclama indemnizaciones para negocios que cierran por las restricciones

Una céntrica terraza de la capital oscense durante las pasadas fiestas navideñas.
Una céntrica terraza de la capital oscense durante las pasadas fiestas navideñas.
Pablo Segura

La hostelería oscense afronta la situación actual de recorte de horarios en su sector con “resignación” tras una Navidad a medio gas. La campaña navideña no ha sido como se esperaba inicialmente debido a las últimas restricciones impuestas por la DGA para tratar de frenar los contagios, unas medidas ante las que estos empresarios exigen ayudas de solvencia empresarial para que se lleven a cabo en Aragón pagos e indemnizaciones. Carmelo Bosque, presidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo de Huesca y propietario y chef del Lillas Pastia, recuerda que en el mundo de la restauración “todo fue anulado por responsabilidad social”. También confía en que la curva de contagios comience a descender en los próximos días. “Estamos cautelosos y pensamos que en cuanto esto mejore habrá que ampliar los cierres. El mundo de la noche es muy difícil que pueda trabajar a unos niveles aceptables para poder abrir con estas medidas”, advierte.

Y es que a causa de las restricciones anunciadas por la DGA el pasado 27 de diciembre, el ocio nocturno ha registrado muy poca actividad durante las fiestas navideñas. No hubo cotillones ni grandes celebraciones en Nochevieja debido a una actividad “muy limitada” hasta las dos de la madrugada y muchos empresarios decidieron no abrir “porque no les salen las cuentas”.

En cuanto a los menús para llevar, Carmelo Bosque comenta que los pedidos han caído sobre un 30 % respecto a otros años. “Al no juntarse los grupos de amigos, se ha facturado menos”, apunta. En hostelería, afirma, se va “soportando más o menos” el día a día, aunque el sector se topa con el “problema añadido” de las bajas de trabajadores. En su restaurante, cita como ejemplo, tiene actualmente a 10 empleados de baja. “Hay muchos trabajadores del sector en esta situación. Quién no va a ser positivo ahora”, plantea. Se refiere a su vez a las ayudas que han llegado a este sector desde el Gobierno de Aragón, al que da las gracias al igual que hace respecto al apoyo económico del Ayuntamiento de Huesca en este sentido. No se olvida de los clientes, “que siempre están allí para apoyarnos”.

Su sector, expone, va a reivindicar medidas de solvencia empresarial “para que se lleven a cabo en Aragón pagos e indemnizaciones a los negocios que cierran debido a las restricciones, como sucede por ejemplo en Galicia. Los que colaboran tienen que ser indemnizados”.

Pese a todo se muestra optimista. “Debemos seguir adelante para que cuando salgamos de la pandemia tengamos una estructura desde la que podamos ofrecer turismo, que es lo que necesita nuestra comunidad”.