Reformar la cocina, el baño o pintar la casa para darle un aire nuevo sigue siendo tendencia entre los oscenses. Pero el actual incremento de los precios, con todo por las nubes, puede encarecer estos trabajos y golpear el bolsillo de los oscenses con un encarecimiento de hasta el 25 % en los materiales, según el trabajo que se quiera realizar en el hogar.

Con el confinamiento, a base de estar tanto entre cuatro paredes, a los vecinos de Huesca les dio por las obras para sorpresa del sector. Tanto es así que en 2020 las reformas en los hogares se dispararon un 40 % respecto al año anterior. La tendencia se mantuvo al alza y volvió a subir ligeramente en 2021, tal y como refleja un informe de la Federación de Asociaciones de la Construcción de Huesca.

La gerente de esta entidad, Manuela Pastor, expone que en la actualidad “todo está subiendo y la construcción no se queda al margen”. Recuerda que este afán por los cambios en casa comenzó a incentivarse cuando los oscenses pasaron mucho tiempo en casa y “vieron lo que estaba mal”. Además, al no salir, se ahorró más y la gente se lo gastó en tener su residencia lo mejor posible.

Así, plantea que esta situación, “ha hecho que queramos rediseñar nuestros hogares solicitando reformas que lo hagan más acogedor, más práctico y acorde a las nuevas necesidades que ahora tenemos, si es necesario el teletrabajo o la práctica de deporte en casa, por ejemplo. “La reacción de la gente fue diferente a la esperada ya que el comportamiento en vivienda fue muy positivo y después del confinamiento hubo un aumento del ahorro y un bajo interés que contribuyó a ello”, apunta.

Pero esta tendencia podría truncarse debido a la inflación y al constante aumento del coste de los materiales. Las empresas ya toman precauciones en este sentido. “Antes se daban los presupuestos para una reforma con una fecha tope de seis meses, un tiempo ligeramente amplio, y ahora mismo duran unos 15 días porque si no, no es inviable”, comenta Pastor. Y apunta que “cuando se aprueba un presupuesto se compra ese material de golpe, para que aunque la obra dure tres meses ya esté adquirido porque en un trimestre igual sube otro 30 %”.

De momento, valora “no hay nada que nos indique que esta tendencia al alza de los precios vaya a bajar. Hay una preocupación muy grande, mucha incertidumbre y una seria problemática”. También para Manuel Lera, de la empresa Decorhogar Reforma, la situación es “complicada”. “Los materiales han subido todos una barbaridad. De media podemos hablar entre un 10 y un 25 %, de manera general. Está difícil”, recalca.

Se refiere especialmente al encarecimiento del material de obra y a la subida de la carpintería de madera, de aluminio, al cristal y al vidrio, “aunque en general, en todo, la subida es una pasada”.

Todo esto, manifiesta, “evidentemente” repercute en el precio que se cobra al cliente por una reforma, en cuanto a los materiales porque el coste de la mano de obra sigue siendo el mismo”, puntualiza. Actualmente, dice, lo más demandado son las reformas integrales de baños y cocinas.

Tendencia

Y a la espera de la tendencia de la inflación, considera que “por el momento, la demanda de reformas en los hogares se mantiene, vamos a decirlo así. Ahora, en estas circunstancias, con el tema de la guerra en Ucrania y la subida de los precios, algún cliente se echará un poquito para atrás, como esperando a ver si esto cambia, pero creo que es complicado que esto varíe tal y como está el mercado de los materiales”.

Así, plantea que “lo bueno sería que la cosa se estabilizara un poco” porque “el encarecimiento de los precios es tremendo”. Tal es la continua subida de los costes de los materiales, explica, que los fabricantes que se dedican a su comercialización “te pueden poner dos días de plazo de validez del presupuesto”.

Por su parte, Eduardo Bescós, propietario de la empresa Decor-Ama Aplic S.L.U., dedicada a la pintura y la decoración, comenta que la subida del precio de todos los materiales hace que cada vez sea “más complicado trabajar”.

Detalla que materiales básicos como el plástico blanco ha subido un 15 % y el incremento es del 10% en otros productos.

El sector, dice, espera que en breve vuelva a subir el precio de la pintura. En algunas tiendas han ido aguantando en las últimas semanas con el stock del que disponían, pero al volver a adquirir material, tienen que subir de nuevo los precios. “No sé hasta donde vamos a llegar”, concluye Eduardo Bescós.