Huesca

día de las fuerzas armadas

Ernesto Larrosa Lanau: “Siempre anhelé vincularme a las Fuerzas Armadas y de servicio”

Es Suboficial Mayor destinado en la Brigada Guadarrama XII del Ejército de Tierra

Ernesto Larrosa orienta y ayuda a mejorar su formación a los suboficiales.
Ernesto Larrosa orienta y ayuda a mejorar su formación a los suboficiales.
S.E.

El oscense Ernesto Larrosa Lanau, suboficial mayor de la Brigada Guadarrama XII, tenía claro que su futuro estaba ligado al Ejército puesto que “desde siempre anhelé vincularme a cualquiera de las entidades relacionadas con las Fuerzas Armadas y de servicio a mis conciudadanos”.

Y es que era un mundo que Larrosa conocía bien porque, como él mismo explica a este periódico, “tengo estrechos lazos familiares tanto por vía materna en cuanto al Ejército de Tierra como paterna con la Guardia Civil”. Así que con tan solo 19 años, añade, “me decanté por encauzar esta vocación hacia el Ejército de Tierra, concretamente en el arma de Infantería” y, en este sentido “con el tiempo he ido confirmando mi vocación -apunta- por encontrarme en un entorno en el cual se trabajan los valores como el espíritu de sacrificio y de servicio, el compañerismo y la disciplina, entre otros”

Su trayectoria, la cual no ha hecho desaparecer su vínculo con Huesca, ya que explica que “sigo manteniendo lazos familiares y mi grupo de amistades que perduran desde mi adolescencia”, comenzó en la Brigada de Cazadores de Alta Montaña, más concretamente en el Regimiento Valladolid 65, posteriormente, fue destinado al Cuartel General de la Brigada Aragón I, en la capital oscense.

“Parejo a mi evolución profesional, también he llevado a cabo una ardua labor formativa que, sin lugar a dudas, también ha contribuido a lo largo de los años a mi progresión tanto en el Ejército como personal. Mis cambios de destinos nunca han sido óbice para seguir formándome, así pues fui trasladado al Grupo de Inteligencia en Valencia. Y por último, tras años de servicio en ese destino, me fueron encomendadas nuevas tareas en el Cuartel General del Ejército en Madrid. Una vez en esta ciudad, en la que llevo diecisiete años y en la que me he asentado y formado una familia, he desarrollado funciones tan variadas como interesantes, como han sido en Unidades del Estado Mayor de la Defensa y en el Ministerio de Defensa, hasta llegar a mi actual destino”. El cual destaca como “una unidad pionera en el esfuerzo e impulso tecnológico, así como en el desarrollo de nuevos proyectos de innovación tecnológica”.

Entre las mejores vivencias de su carrera profesional subraya “el momento de mi entrega de despacho en la Academia General Básica de Suboficiales, que marcó el inicio de mi carrera militar y la participación en mi primera misión en el extranjero”.

Sobre este asunto, revela que “todas las misiones me han aportado algo, pero si tuviera alguna que destacar, sin duda es la primera de ellas, en Bosnia I Herzegovina, donde participé formando parte tanto del contingente de Naciones Unidas y, después, en la IFOR de la OTAN. También guardo un recuerdo especial de mi participación en la Fuerza Multinacional (AFOR) en Albania para asistir a la ingente cantidad de refugiados. Fue la misión en la que con más crudeza fuimos testigos de las crueldades de los conflictos armados”.