Huesca

SAN LORENZO 2022

Luis Felipe: “Van a ser las fiestas de siempre, las que no hemos podido vivir”

El alcalde de Huesca desea que sean unos días de alegría y de mucha participación, siempre con respeto,

Luis Felipe, alcalde de Huesca.
Luis Felipe, alcalde de Huesca.
Verónica Lacasa.

Una de las decisiones más desagradables para un alcalde, sobre todo de Huesca, es anunciar que no va a haber fiesta, y le ha tocado hacerlo en dos ocasiones. Por ello, desea que sean unos días de alegría y de mucha participación, siempre con respeto, para que nada empañe unas fiestas llamadas a recordarse en la historia vital de cada oscense

Son las fiestas de la vuelta, ¿qué espera?

—Estas van a ser las fiestas de siempre, tremendamente participativas, como lo han sido en su historia reciente, abiertas, acogedoras... Una celebración de calles y plazas, de peñas y de símbolos laurentinos. Van a ser unos festejos después de dos años de pandemia, donde en el calendario de los jóvenes no ha habido San Lorenzo.

Por ello, ¿cobrarán más fuerza los elementos tradicionales?

—Posiblemente tengan una mayor participación de los elementos de la fiesta, estas siempre se articulan en torno a las tradiciones, a iconos o referencias que nos generan sentimiento de pertenencia. En este caso en concreto, en torno a las cofradías, los danzantes, la feria taurina, que tiene importancia y marca el devenir de las fiestas. Un buen cartel de la feria taurina aventura una buena calidad de las fiestas. También la celebración en torno a las peñas, un instrumento que permite la acogida, por lo que es un elemento muy importante que hay que cuidar.

Destaca la feria taurina, ¿cómo valora el cartel?

—Tauroemoción ha hecho un esfuerzo por hacer un cartel atractivo, no solo al oscense que vive San Lorenzo, sino a los entendidos que se mueven en diferentes ferias y plazas. Este cartel permite no solo que sea un elemento importante de la fiesta, sino de atracción. Miles de personas van a venir y vivirán la fiesta.

¿Qué papel jugarán las peñas en este año de regreso?

—Las peñas tienen un carácter reivindicativo, surgieron así. En la mayoría de las ciudades, tienes ese papel de contrapoder. Se ve el día 9 en las pancartas. Pero, sobre todo, son elementos que favorecen la acogida y grupos de referencia. Cada peña tiene su historia, sus edades, sus momentos... Nunca me invadió la duda de que pudiera haber un desencuentro importante entre el Ayuntamiento y las peñas, como con otros elementos fundamentales de la fiesta.

Al margen de la negociación con las peñas, no ha habido polémicas previas.

—Este San Lorenzo estamos muy volcados en que sean las fiestas de siempre, las que no hemos podido vivir por la covid, porque hay una decisión que es difícil para un alcalde de una ciudad: decir que no va a haber fiesta, y eso me ha tocado en dos ocasiones.

Especialmente en Huesca, donde San Lorenzo marca el calendario vital, ¿no?

—Es una parte importante de lo que somos, pero también en torno a San Lorenzo se mueve mucha economía.

¿Serán las fiestas de siempre pero como nunca?

—Con los elementos que he nombrado y también con la Parrilla de Oro, máxima condecoración que entrega la ciudad a protagonistas de la fiesta, que este año ha sido para el Club Ciclista Oscense, por la carrera que se organiza desde hace 69 años. Es un reconocimiento y un guiño a la vida saludable.

¿El acto se ha sacado de la fiesta, para que tuviera su propia entidad?

—Como se celebró fuera de fiestas por la pandemia y fue muy aceptado, pensamos que tuviera su propio espacio para que adquiriera mayor significación y vinculado a un concierto.

Como el de las mairalesas.

—Este es un acto multitudinario prelaurentino. Pero también es importante el hermanamiento con Tarbes del día 9, antes del cohete, así como el disparo de este, que ha recaído en la Fundación del Cine de Huesca, como gratitud al Festival, que lleva 50 años en pro de la cultura. El cohete y la parrilla se conceden por acuerdo de los grupos, no suele haber discrepancia.

La fiesta mantiene la estructura de siempre, los escenarios... ¿Es lo que se buscaba?

—Definir los espacios es tan importante como definir la programación. Siempre ha habido un debate de si la fiesta debe trasladarse a los barrios. Es bueno que todos perciban la fiesta, pero las fiestas de las ciudades se viven en el centro, en todas las ciudades de España. Los espacios festivos deben permitir desarrollar las fiestas con plenas garantías de seguridad.

Pero también el programa.

—El modelo de las fiestas de San Lorenzo es de hace 50 años, gusta a la ciudad, es nuestro y habla mucho de nosotros. Otra cosa son los centenares de actos, en los que todos los públicos se tienen que ver representados, que en esos espacios todo el mundo pueda vivir su fiesta. Es el reto de todos los años.

Pero siempre se reclaman grandes conciertos y...

—Sí, pero aquí las fiestas son gratuitas y en otros lugares se paga entrada para ir a conciertos. En esa programación musical, se buscan artistas de renombre que puedan ser un atractivo, pero es más importante el que lleguen a los públicos. Por ejemplo, algo que se ha logrado en los últimos años es que las verbenas sean muy populares y respondan cada vez a más públicos. Estamos viendo jóvenes que antes apenas participaban en López Allué. La ciudad estableció hace años el recinto ferial, espacios muy abiertos para grandes conciertos, seguros y cómodos. Es algo que se resolvió en la década de los 2000 y es un logro.

¿Se espera más gente en los actos más tradicionales?

—En estos actos en los que la Cofradía tiene mucho que decir, cada vez hay mayor afluencia y requiere de una buena organización para que todo el mundo pueda participar. El acto más solemne en todo el año, la procesión del 10 de agosto, es ese día en el que la gran simbología de la ciudad se vive en la calle, en el que se mezcla el acto religioso y el civil, con el Cabildo de la Catedral junto al municipal. Debe ser un acto tremendamente respetuoso con la ciudad, es solemne, no es un acto reivindicativo.

¿Es una llamada a que no haya protestas en el “Jerezano” o en la Costanilla de Santiago?

—Es inevitable que pueda haber reivindicaciones si se hacen con respeto, pero a lo largo del año hay muchos eventos y muchos espacios para ello. Hay que concederle respeto al acto.

Las fiestas de siempre. ¿Qué momento quiere revivir?

—La llegada de las fiestas marca el calendario de la vida de la gente. Hay dos momentos clave: preparar la fiesta y, en segundo lugar, la culminación, disparar el cohete anunciador.

Ahora que la tenemos aquí, ¿cómo se ha preparado Huesca para el regreso?

—Para mucha gente joven, es su primer San Lorenzo. Desde el Ayuntamiento, desde la Junta de Seguridad, hacemos un llamamiento a que sean unas fiestas muy participativas, muy alegres... pero muy respetuosas con los demás.

¿Con mayor seguridad?

—Hay unos 150 efectivos de Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local y Policía Nacional Adscrita, más dispositivos de emergencia como Cruz Roja y Protección Civil. Participó la directora del IAM, porque es muy importante que desde el concepto global de seguridad se aborde la violencia machista, también desde una perspectiva preventiva. El objetivo es garantizar la seguridad de todos y prevenir situaciones que no deben darse. Todos los días a primera hora habrá una Junta de Portavoces para abordar cómo se desarrollan las fiestas.

¿Serán unas fiestas históricas?

—Sí, porque hemos pasado una pandemia que es histórica. Hemos contenido las ganas de fiesta durante dos años y formará parte del calendario vital

“La ciudad está bien posicionada para el futuro”

¿En qué momento se encuentra la ciudad?

—Debe sentirse orgullosa porque estamos viviendo dos años de complicaciones, pero la ciudad no se resiente. Vivimos las fiestas de San Lorenzo con una gran explosión de alegría, un indicador de que la salud de la ciudad es buena. Huesca tiene proyectos en desarrollo y otros que se van a desarrollar que hablan de una actividad importante de futuro y está bien posicionada en espacios de desarrollo.

Pero se echa en falta la llegada de grandes empresas.

—Ya se ha anunciado una empresa que va a atraer a 200 ingenieros y que funcionará en 2024 y Amazon lleva un buen ritmo para que a finales de año pueda generar una actividad que nos ponga en el mapa nacional e internacional. Hay proyectos importantes como ha sido la llegada del cuartel o nuevas empresas en colaboración con la DGA.

Pero hay un problema de falta de vivienda.

—Se ha desbloqueado el polígono de las Harineras, Textil Bretón, Área 7, la Merced... espacios que tienen que ver con promociones y en los próximos años habrá un importante número de vivienda, y vivienda asequible para jóvenes.

¿Huesca va a crecer?

—Ha sido de las capitales que ha aumentado en los últimos 10 años y ese crecimiento se va a ver respaldado por la llegada de inversiones. Huesca está vinculada a la provincia, equilibrada por sus cabeceras de comarca, y debe ejercer ese liderazgo. A Huesca le tiene que preocupar y ocupar el desarrollo de los regadíos, del ferrocarril, de la nieve... Debemos cooperar con el territorio y con la gran ciudad de Aragón, que es Zaragoza.

Recta final para las elecciones, ¿qué quiere acabar?

—La traída de agua de Montearagón, el compromiso del Gobierno de España con nuestro patrimonio como la catedral, casino...; generar espacios para ese campus de la UZ y ser referencia en ciberseguridad; ver cómo las grandes empresas que llegan ejercen de elemento tractor; Huesca tiene que recibir industria de transformación agroalimentaria...

Será el candidato del PSOE y se le conocen pocos rivales, ¿le da ventaja competitiva?

—Soy el candidato y quiero revalidar mi puesto de alcalde, pero ser respetuoso con el resto de formaciones que tienen sus tiempos para decidir quiénes son sus candidatos. l