Huesca

SAN LORENZO 2022

Tradición desde la cuna: "Salió por primera vez con diez días"

Huesca se engalana de trajes regionales para despedir al Santo entre dances, música, emoción y productos de la tierra

Jorge es de Fornillos y tiene 28 años. Lleva saliendo en la procesión desde hace 26. “Esto es vocación, lo tienes que vivir desde pequeño para querer salir”, opinó.

Aún con más años a las espaldas está el grupo folcklórico Roldán del Altoaragón. Tiene “39 años” y es “el segundo grupo más veterano de Huesca capital”. Este, una de las muchas agrupaciones que dan vida al desfile y, que con jotas, dances y gaitas veneran al Santo.

Y portando cestas en vez de bandurrias y castañuelas, están la mayoría de los que participan de esta procesión. Muchos de ellos, desde que eran niños. “Me han hecho trajes desde los cinco meses”, contó un jotero. “Llevo vistiéndome desde que tenía cuatro años y ahora yo visto a mis hijos”, agregó otra. Otras, como Cayetana, “salió por primera vez con 10 días”, explicó su madre. Ayer llevó un traje hecho por su abuela.

En este encuentro de ansotanas, chesas o fragatinas que contrasta con el blanco y verde de los peñistas, se escapan trajes como el de Natalia que descubren que la devoción por San Lorenzo puede despertar más tarde. “Mi traje es de Tenerife”, comentó la canaria. “Aquí estamos norte y sur”, bromeó su amiga Mari Sol, vestida de chesa.

Y en las cestas, los productos de la tierra que son “un guiño” a los orígenes de los oscenses que muchas veces tienen sus raíces en otros puntos de la provincia.

La ausencia de danzantes

La covid y las lesiones no han perdonado. “Después de tanto tiempo...”, lamentó al borde de la lágrima Jorge Escario, danzante que se dañó el gemelo el día 10 ante la basílica de San Lorenzo.

En total son cinco los que han tenido que ausentarse: cuatro danzantes y el rapatán.