Dos tercios del agua que consume Huesca se bombean desde Valdabra

Dos tercios del agua que consume la ciudad de Huesca se bombean desde Valdabra, del canal del Cinca, gracias a la obra de emergencia que se acometió en 2005 cuando una acuciante sequía amenazaba con dejar a la ciudad sin agua durante todo el verano. Desde el mes de agosto, la capital altoaragonesa está utilizando esta infraestructura, rebajando así su consumo de Vadiello, de donde se abastecen 47 núcleos más pertenecientes a 16 municipios, y que se encuentra por debajo de los tres hectómetros desde hace mes y medio. Ayer, tan solo sumaba 2,27 hectómetros, un 14,71% de su capacidad, siendo algo menos de la mitad embalse muerto por los lodos del fondo.

En estos momentos, del embalse de Vadiello, la ciudad de Huesca coge solo 50 litros por segundo, entorno a los 4,2 millones de litros de agua al día. El resto, hasta los 15.000 metros cúbicos, los 15 millones de litros diarios que se consumen en la capital en la actualidad, se traen de la balsa de regulación del canal del Cinca de Valdabra, según los datos facilitados por el Ayuntamiento de la ciudad.

Fuentes municipales explicaron que fue el pasado mes de agosto, cuando las reservas de Vadiello comenzaban a flaquear y la persistente sequía hacía mella en las reservas de agua, y “en previsión de que no lloviera”, tal y como ocurrido, cuando comenzó a bombearse agua del canal del Cinca. La cantidad ha ido aumentando progresivamente, dado que las lluvias siguen sin aparecer, las reservas de Vadiello continúan cayendo en picado, y el embalse debe dar suministro a 47 poblaciones más. No obstante, Huesca capital es la más numerosa, con 55.000 usuarios de los 70.000 que se abastecen del pantano.

Cien litros menos por persona y día

Desde el consistorio recalcaron que, en la actualidad, la ciudad de Huesca ha reducido su consumo hasta los 15 millones de litros diarios, lo que supone una media de 272 litros por persona y día, muy por debajo de los entre 20 y 22 millones (entre 363 y 400 litros por persona y día) que se utilizaban antes de los llamamientos a la mesura ante una sequía que estaba dejando los pantanos a mínimos y algunos acuíferos casi secos.

La utilización de la opción de Valdabra como refuerzo para el abastecimiento a Huesca, la población más poblada de las 48 a las que sirve de suministro, ha dado un respiro a Vadiello, un pantano en el que tan solo quedan 2,27 hectómetros cúbicos. El pantano, cuyos lodos del fondo invalidan más o menos la utilización del último hectómetro, sigue desembalsando entre 16 y 18 millones de litros diarios (0,016 hectómetros) para mantener el caudal ecológico y abastecer al resto de poblaciones que dependen de él mientras llega la ansiada traída de agua de Montearagón. El Gobierno anunció hace un mes 22 millones de euros para esta obra, que lleva casi dos décadas esperando Huesca.