Huesca

ENTEVISTA

Lorena Orduna: "Huesca necesita mucho trabajo bien hecho que, de momento, yo no lo veo"

La candidata a la Alcaldía por el PP aspira a dar luz a la capital oscense

Lorena Orduna, candidata a la Alcaldía del Partido Popular.
Lorena Orduna, candidata a la Alcaldía del Partido Popular.
Pablo Segura

La ejecutiva Lorena Orduna (Huesca, 1976) es la candidata a la Alcaldía del Partido Popular. Su energía y ganas de dar un impulso a la capital oscense rompen esquemas. Derrocha vitalidad, entusiasmo y, aunque es su primera incursión en política, no duda de su capacidad para hacer de Huesca “una ciudad de futuro” si logra la alcaldía en las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. Entre sus herramientas, esta oscense que actualmente es la directora general de Arizón & Gracia, empresa dedicada a servicios especializados para edificaciones, destaca su gran capacidad de trabajo.

Para los que no le conozcan, ¿quién es Lorena Orduna?

—Soy oscense de nacimiento y de pura cepa. Toda mi familia es de Huesca. Soy madre de dos niños, Darío y Néstor, de 11 y 7 años, y toda mi vida la he dedicado al mundo de la empresa. Tengo varias carreras, en la Universidad de Zaragoza estudié Graduado Social y luego Ciencias Políticas y Sociología. Ya me gustaba entonces el mundo de la política, pero la vida te lleva y me absorbió el mundo empresarial. Estuve en banca primero y luego en Arizón & Gracia, donde trabajo en la actualidad.

¿Qué le ha llevado a presentarse como candidata a la Alcaldía de Huesca por el PP?

La propuesta fue muy meditada, me pareció desde el principio muy atractiva y una apuesta muy fuerte, tanto a nivel personal como familiar y profesional. Estoy muy acostumbrada al ámbito de la empresa pero no al de la política. Cuando me propusieron liderar este proyecto para que Huesca cambiara y poderla incentivar, mover y revolucionarla un poco, me pareció muy muy interesante y al final acepté.

¿Qué contacto ha tenido con la política hasta ahora?

Estuve afiliada a Ciudadanos pero era una afiliada base que no tenía nada que ver con nada. No tenía ningún cargo orgánico ni institucional. Prácticamente no participé en nada.

¿Por qué dejó Ciudadanos?

—Estuve muy poquito tiempo, pero me fui en 2019 cuando pasó lo del voto en blanco. No lo entendí, no me pareció bien y me desafilié. No cumplieron lo que habían acordado.

¿Ha pensado ya en la lista que le acompañará, en el equipo con el que quiere gobernar Huesca?

—Lo estamos trabajando ahora. Cuento con un equipo de compañeros con gran experiencia que llevan en el Ayuntamiento de Huesca dos o tres legislaturas, otros menos, y estamos ya trabajando en conjunto, por supuesto. Vamos por fases. Queremos reunirnos con todo tipo de asociaciones de la ciudad. Estamos manteniendo encuentros con la Federación de Barrios Osca XXI, con empresarios, con CEOS, con la Sociedad Deportiva Huesca, con Asaja. Vamos a reunirnos con todos los entes sociales que conforman esta ciudad porque creo que es tremendamente importante y necesario. Vamos a repasar todo de arriba abajo.

¿Qué sensaciones ha recogido desde que anunció su candidatura?

—Hay una anécdota que me parece curiosa. Desde que salí en prensa voy por la calle y la gente me para. Me cuentan los problemas que tienen con su calle, con arbolado, con las luces o con los patinetes. Es decir, me están llegando todo tipo de comentarios de vecinos de Huesca que me parecen súper útiles para recoger todas esas ideas, trabajarlas y hacer una propuesta real.

¿Qué herramientas tiene Lorena Orduna para ser alcaldesa?

—Cuando me preguntan: ¿Tú qué sabes hacer? Pues yo trabajar, digo. Es decir, desde la mañana hasta la noche. Porque soy una persona tremendamente inquieta, que me gusta todo en la vida. En una empresa estás constantemente renovando, cambiando y avanzando porque si no mueres, cierras. Una ciudad tiene que hacer lo mismo. Tienes que tener la capacidad de ver qué va a pasar, qué está pasando en otras capitales, qué sucede en Europa, en el mundo, para proyectar tu ciudad. Si no lo hacemos, se queda en nada. Creí que este proyecto lo tenía que liderar porque estoy muy acostumbrada a trabajar, a tratar con la gente y soy casi inagotable. Tengo mucha energía y la voy a necesitar porque la capital oscense requiere de mucho cambio.

¿Cómo valora la Huesca actual?

—La capital altoaragonesa de hoy me da mucha pena. Realmente estoy muy preocupada. Veo una ciudad que ha tenido un brillo espectacular. Yo la adoro, me encanta, soy de aquí. He tenido la suerte de trabajar, de viajar, de moverme por muchos ámbitos y sigo en Huesca porque quiero esta ciudad. Pero, por otro lado, me da pena porque veo que no destacamos en casi nada. Teniendo un potencial tan brutal, una ciudad tan preciosa, tan antigua, de hace 6.000 años, un montón de civilizaciones que han pasado por aquí la han hecho brillar. ¿Por qué ahora no? ¿Por qué hemos caído en esta obsolescencia? Hay que darle luz a esto.

¿Qué cree que no se ha hecho bien en la ciudad en estos últimos años?

—Prefiero no valorar lo que no se hace bien. Lo que quiero es hacerlo bien yo con mi equipo y que los oscenses vean ese cambio y que Huesca entera se dé cuenta de que aquí va a haber un cambio. Queremos ganar para cambiar las cosas y, sobre todo, tenemos que darle un futuro a nuestra ciudad. Hay que mover la economía, las asociaciones, a todo el mundo para que esto vibre y funcione. No tomar decisiones es una decisión también. El equipo de gobierno actual no toma decisiones, no se mueve y yo quiero hacer todo lo contrario. Movimiento.

Si ocupa el sillón de la Alcaldía, ¿ya sabe por dónde va a empezar a trabajar?

—A nivel personal tengo una lista como con 300.000 problemas y ahora estamos recuperando otros tantos de toda la gente con la que nos estamos reuniendo. Haremos buenas propuestas para que los ciudadanos vean que Huesca tiene un futuro y que la tenemos que sacar de la inactividad.

Si usted llega a ser alcaldesa recogerá además el testigo de la popular Ana Alós...

—Para mí es un referente como mujer, como persona, como política. Es increíble, tiene una gran capacidad de trabajo y fue una alcaldesa magnífica. Le dio un giro a Huesca tremendo y, por supuesto, voy a seguir su línea. Ante la falta de impulso hace falta un trabajo espectacular para hacer una ciudad de futuro. Huesca ciudad de futuro va a ser mi lema de aquí al infinito.

¿Le ha dado algún consejo Jorge Azcón?

Muchos, y Ana Alós también. Nos llamamos y hablamos mucho. Quiero que Jorge Azcón gobierne porque si él está en el Pignatelli, Huesca volverá a brillar. Recuperaremos lo que había antes y además voy a estar todos los días llamando a su puerta, pidiendo cosas para mi ciudad. Le voy a dar mucho mal. (Risas)

¿Cómo será la Huesca del futuro si Lorena Orduna es alcaldesa?

—Será una Huesca europea, social, con universidad, con turismo, con gastronomía. Huesca tiene que ser la puerta de nuestra provincia, la capital. Tenemos que tener visitas, viajeros, unos buenos servicios sociales, hay que atender a la gente mayor y tener a los jóvenes entretenidos. Hay que fomentar la cultura, el deporte, el arte... Hay miles de historias que tenemos que hacer.

¿Y qué piensa que sucederá el 28 de mayo en las elecciones municipales y autonómicas?

—Con Jorge Azcón, como presidente de la Comunidad, Natalia Chueca en el Ayuntamiento de Zaragoza, Emma Buj en el de Teruel, y yo en Huesca, vamos a teñir de azul Aragón y ojalá España en las próximas generales porque hace falta un cambio muy grande en todas las instituciones. Huesca necesita mucho trabajo bien hecho que, de momento, yo no lo veo.