STEA acusa a la DGA de incumplir la reducción de horas lectivas

STEA, el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Aragón, acusó al Departamento de Educación de no respetar el acuerdo de la Mesa Sectorial del 21 de noviembre sobre la reducción de horas lectivas, al no incluirlo en la negociación de las plantillas jurídicas iniciada esta semana. La Consejería respondió en su momento que esas reducciones se aplicarían en la negociación de cupos con los equipos directivos, mientras que CGT terminó por abandonar la mesa de negociación en Huesca al entender que no se tuvo en cuenta el Pacto para la reducción y mejora de las condiciones laborales docentes, es decir, la reducción a 24/19.

Sin embargo, el Departamento de Educación ha rectificado e informó este lunes sobre la intención de convocar nuevas mesas para revisar las negociaciones en base a este acuerdo.

Desde STEA lamentan que, “es inadmisible que no sea en las mesas de negociación de las plantillas jurídicas de los centros donde se continúen calculando las horas de cada especialidad en función de las horas lectivas pactadas el 21 de noviembre en Mesa Sectorial”, manifestó STEA.

El sindicato también destacó el impacto de la reducción de horas lectivas en la mejora de la calidad de la educación, ya que “menos horas lectivas implica una ratio más baja de alumnado por docente, con lo que se puede dedicar más tiempo a cada alumno atendiendo la creciente diversidad entre los mismos”.

STEA consideró que la postura de Educación “no es tolerable” por varias razones, comenzando por que genera “desconfianza” respecto al acuerdo del 21 de noviembre (rebaja de 2 horas lectivas para el profesorado mayor de 55 años y de 1 para el resto, a partir del curso 23/24).

El segundo motivo fue que “no se ha respetado el foro de negociación legalmente previsto, las mesas con los sindicatos y los representantes del profesorado, sustituyéndolo por la negociación de cupos a posteriori con los centros”. Esto implica, que “la Administración negociará con la propia Administración”, “desvirtuando el proceso negociador”.

Una tercera razón “es la reducción del número de vacantes para el concurso de traslados”, así como determinadas comisiones de servicio para el funcionariado de carrera.