La DPH baraja que Grhusa se encargue de su limpieza

La huelga indefinida de los trabajadores del sector de la limpieza de locales y edificios de Huesca cumple este viernes doce días sin acuerdo y a la espera de un nuevo convenio colectivo. El conflicto ha llegado hasta las administraciones, que barajan tomar cartas en el asunto si no llega pronto una solución.

La Diputación Provincial de Huesca (DPH) ha manifestado el interés de su Presidencia de analizar posibles alternativas que permitan remunicipalizar el servicio de limpieza en las distintas instalaciones provinciales. Una de ellas podría ser la encomienda o encargo de su gestión a Grhusa como empresa pública.

El presidente de la DPH, Miguel Gracia, ha solicitado que se analice esta posibilidad y los pasos precisos a seguir, de manera que la Diputación podría proceder próximamente a la licitación de un nuevo contrato de limpieza. Las limpiadoras pasarían a ser entonces trabajadores públicos.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, también ha mostrado este jueves su apoyo al sector y ha pedidoa las empresas, que doten de “estabilidad” y “calidad” al empleo de estos trabajadores, cuya reivindicación valoró como “justa”.

Fuentes municipales han indicado este jueves que, por el momento, el Ayuntamiento aboga porque ambas partes lleguen a un acuerdo satisfactorio que permita desconvocar una huelga cuyas consecuencias están afectando a los edificios municipales, principalmente a los colegios. Si ambas partes no llegan a un acuerdo, ha indicado dichas fuentes, el Consistorio junto con la DPH “explorará las diferentes alternativas existentes”.

Cabe recordar que estos trabajadores reclaman que se les pague el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), de 1.000 euros brutos al mes, ya que afirman que sus nóminas no alcanzan los 800 euros por una jornada completa. Denuncian que las patronales Aspel (Asociación profesional de empresas de limpieza), en la que se asocian las de implantación estatal, y Afelín (Asociaciones Federadas de Empresarios de Limpieza Nacionales), en la que se congregan las empresas locales, han deteriorado las condiciones de trabajo de este sector altamente feminizado y quieren sentarse con ellos a negociar mejoras.

Por el momento no hay un encuentro a la vista pero desde la Confederación Empresarial de la Provincia de Huesca, Ceos-Cepyme, aseguran que sí se cumple el SMI, que están “abiertos por completo” al diálogo y que tienen “un gran problema” con trasladar el coste de la subida del salario mínimo al cliente.

Salvador Cored, director general de Ceos-Cepyme Huesca, expone estas cuestiones y valora que la huelga está teniendo un seguimiento “muy bajo”, que no llega ni al 2 % de las trabajadoras, del sector público porque en el privado es “prácticamente nula”. También indica que los empresarios ya han puesto sobre la mesa sin éxito un calendario de cinco reuniones “para desatascar el tema” y una cláusula para garantizar que todo el mundo cobre el SMI.

“Nosotros no vamos a mover ficha, ya lo hicimos y no sirvió de nada. El desacuerdo está en que ellos quieren que el salario base sea igual al Salario Mínimo Interprofesional, pero resulta que hay sentencias judiciales que dicen que el SMI se compone por el salario base y por otros complementos salariales, como por ejemplo la antigüedad, y esa es la discrepancia”, explica.

Por su parte, Mariano Alvárez, secretario de Acción Sindical y Negociación Colectiva de CC.OO. Hábitat Aragón, destaca el “nivel de resistencia y dignidad increíble” de estas trabajadoras. También hace una llamada de atención “a todos los que se han comprometido a intervenir” y asegura que “a alguien que entre a trabajar hoy en día en el sector no se le garantiza que cobre los 14.000 euros anuales, “y eso es lo que exigimos, que en los conceptos fijos de la nómina se garantice esta cantidad porque no todo el mundo tiene ciertos pluses”.