BARRIOS
Osca XXI lamenta que la nueva escuela infantil de Huesca no beneficie al Perpetuo Socorro ni a la ciudad
El Consejo de Gobierno ha aprobado crear un nuevo centro en el Acuartelamiento Sancho Ramírez de Huesca con 3 aulas para 41 plazas escolares

La Federación de Asociaciones de Vecinos de Huesca, OSCA XXI, ha lamentado que la nueva escuela infantil de primer ciclo de Huesca no beneficie al barrio del Perpetuo Socorro ni a la ciudad en general y sólo satisfaga las demandas de apoyo a las familias cuyo personal está destinado en el acuartelamiento Sancho Ramírez.
El Consejo de Gobierno ha aprobado crear una nueva escuela infantil de primer ciclo en el Acuartelamiento Sancho Ramírez de Huesca, que contará con 3 aulas para 41 plazas escolares.
Una escuela que se crea en dependencias militares para satisfacer la demanda de apoyo a las familias del personal destinado en las Unidades de la Plaza para la conciliación familiar y mejora de sus condiciones laborales, dada la importancia que tiene la implementación de medidas efectivas que favorezcan esta conciliación entre los miembros de las Fuerzas Armadas y el personal civil a su servicio, según se ha apuntado desde el Gobierno de Aragón.
El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Huesca, OSCA XXI, Javier Moreno, ha calificado de "positivo" que los militares puedan beneficiarse de este centro, pero ha lamentado que no lo haga el barrio del Perpetuo Socorro y la ciudad en general.
"Valoramos muy positivamente que este centro facilite a los militares la conciliación, pero esto no era lo que se esperaba, ya que lo que se esperaba era que las inversiones que la ciudad realizaba a través del Ayuntamiento redundarían en beneficio de la ciudad y vemos que con este planteamiento no se puede beneficiar ni el barrio ni la ciudad, ni satisfacer la necesidad de educación primaria que hay en el barrio".
Además, ha lamentado que no se fomente la relación entre el cuartel y la ciudad. "Vemos esta creación bien por los militares, pero no es lo que esperábamos en la ciudad, ya que la llegada del cuartel creíamos que sería un revulsivo, porque venían a la ciudad a trabajar con sus familias a vivir y a relacionarse y vemos que se van a quedar aislados".