NOVENA DEL SANTO CRISTO DE LOS MILAGROS
“Las misas son una oportunidad para rezar y pedir al Santo”
La novena al Santo Cristo de los Milagros comenzó con la celebración de tres eucaristías en horario de mañana y tarde

La fuerza de la devoción regresó este lunes 4 de septiembre a la Catedral de Huesca con el inicio de la Novena al Santo Cristo de los Milagros, nueve días desde ayer y hasta el 12 de septiembre (festividad) para que oscenses y visitantes se acerquen al venerable.
El hito religioso dio comienzo con la celebración de tres misas en diferentes horarios para que “todos los oscenses tengan la oportunidad de acudir”, razón por la que también se alarga varios días, explica Vicente Estévez, prior de la Cofradía. La primera de ellas, a las 8:00 horas fue presidida por el obispo, Julián Ruiz Martorell, que dio la bienvenida a la Novena, posteriormente la programada a las 10:00 horas y finalmente la celebrada a las 19:00 horas y oficiada por Raúl Pallás, vicario parroquial, donde acudieron más de un centenar de fieles, incitados por la “devoción” que sienten por uno de los santos más “queridos” en Huesca, junto a San Lorenzo y San Vicente Mártir.
Al inicio y final de la misa, muchos fieles aprovecharon para llevar consigo un recuerdo del Santo en forma de cinta con la medida del Santo, pulseras, calendarios, rosarios o colgantes con su imagen, ofrecidos por las “camareras” de la Cofradía, en su sentido más literal, “las que sirven al Santo”.
El inicio de la novena marca la cuenta atrás para celebrar el próximo martes 12 de septiembre la conmemoración del “milagro” que se produjo en 1497, cuando el Santo Cristo de los Milagros intervino para acabar con la mortandad producida por la peste que asolaba a Aragón y al resto de España.
Vicente Estévez, prior, recuerda que esta devoción se remonta al origen de la tradición, que señala que el obispo decidió sacar el Santo Cristo a la puerta para rogarle que erradicara la enfermedad que tanto daño estaba produciendo a la población. “Estamos convencidos de que fue así porque existen manuscritos de la época que lo atestiguan” señala y continúa recordando que cuando el Santo Cristo iba procesionando, “al monaguillo le cayó una gota de sangre. Una señal del Santo Cristo que demostró que estaba con Huesca. A partir de ese momento remitió la enfermedad”, explica el prior.
Desde aquel capítulo, la devoción de los oscenses por el venerable “se mantiene y crece”, asegura. Las misas, que se celebrarán este martes 5 de septiembre en el mismo horario- a las 10:00 horas presidida por el obispo Julián Ruiz- “son una oportunidad para rezar y pedir al Santo lo que sea”, afirma Estévez. Las familias que deseen presentar a los niños al venerable lo podrán hacer el sábado 9 de septiembre de 11:30 a 12:30 horas. Mientras que el día grande (12 de septiembre) se celebrará a partir de las 8:00 horas con la recepción de peregrinos, el traslado del santo Cristo al altar mayor y la misa presidida por el obispo, además de la procesión de retorno del Santo a su capilla, a las 19:00 horas.