Opinión
Por
  • TEÓFILO MARCO ESTELLA

Ponerse a pedalear

La expectativa de ese gran pacto sobre la Educación entre todos los partidos políticos, que no sea lo que Horacio, dice en Arte y poética: "Parirán los montes y nacerá un ridículo ratón." Yo no sé qué van a quitar y poner en esa reforma de la ley de Educación, pero opino que, si no ponen, por ejemplo, más respeto y estima al maestro-profesor, y que el alumno estudie con más esfuerzo, puede quedar la reforma en "aguas de borrajas", cosa que poco vale. Porque dice un poeta (Melchor de Palau): "Dios con rodear de espinas las rosas de los rosales, nos enseñó que lo bueno se logra a fuerza de sangre." A fuerza de sangre, de esfuerzo, en San Andrés de Itzapa (Guatemala) los indígenas de origen maya aprovechan partes de bicicletas usadas para construir "bicimáquinas": sencillos electrodomésticos que no necesitan electricidad para funcionar, tan solo ponerse a pedalear. De esta forma, han creado lavadoras, desgranadoras de maíz, bombas de agua, afiladores, generadores de electricidad y todo aquello que necesitan para aplicar a sus labores cotidianas, en el trabajo y en sus casas.

Respuesta de Newton cuando le preguntaron cómo había podido descubrir su sistema mecánico del Universo. "Pensando en ello día y noche." Si la nueva ley de Educación no pone a pedalear al alumno, a estudiar con esfuerzo porque para él es una obligación como ciudadano, tal como lo hace el obrero manual, mal servicio le hará a la sociedad que paga gran parte de la Enseñanza-Educación.