Opinión
Por
  • JAVIER ÚBEDA IBÁÑEZ

La cultura y la escuela, objetivos prioritarios

La cultura es el objetivo del nuevo comunismo (marxismo del siglo XX-XXI y el europeísmo, es decir, eurocomunismo).

Según Gramsci (teórico marxista y político italiano), son los intelectuales -marxistas- quienes han de operar ese cambio cultural.

Pero los intelectuales, como todo el mundo, se forman en la escuela. Por eso el dominio de la escuela es especialmente importante en esta nueva versión del marxismo.

Esta penetración en el campo de la enseñanza no se limita solo al aspecto docente, sino que se extiende además a todos los campos relacionados con la educación. Especial importancia tienen aquellos puestos de carácter decisorio hasta puestos de alcance nacional.

En palabras de Gramsci: "La conquista del poder cultural es previa a la del poder político, y esto se logra mediante la acción concertada de los intelectuales llamados "orgánicos" infiltrados en todos los medios de comunicación, expresión y universitarios".

No hay sociedad libre si la cultura y su transmisión están en manos del poder. Si el Estado se convierte en el sujeto de la cultura y en sus manos está el medio de su transmisión, que es la enseñanza, no es posible el hombre libre. Para construir una sociedad verdaderamente libre es indispensable que la ciencia y la cultura estén en manos de la propia sociedad. No hay peor encadenamiento de la persona y de la sociedad que el dirigismo cultural, o sea atribuir al Estado la función de dirigir la cultura y su transmisión.