Opinión
Por
  • VENANCIO RODRÍGUEZ SANZ

Confundir las hortalizas con la velocidad

Jordi Pujol intentó mezclar la crítica a su partido con la crítica a Cataluña, pero no cuajó. Más tarde se supo, gracias a la ex novia de su hijo, que era un corrupto y un traidor a su tierra. Y por eso derribaron la estatua faraónica que, cariñosamente, le habían dedicado sus paisanos en un parquecillo de Premiá de Dalt. Ahora intentan mezclar, de forma interesada creo yo, la crítica a la ley de violencia de género con la crítica a la mujer, y es que esto un grave error. Lo que hay que preguntarse es ¿quién saca tajada de esta sanfaina A estas alturas de la película, no creo que haya nadie que no crea en la igualdad de derechos y obligaciones entre los dos sexos. Pero una cosa es esto, y otra es cerrar los ojos ante los despropósitos que esta ley está generando en los juzgados a raíz de las subvenciones y otras suculentas ventajas. Y si no me creen a mí, que se lo pregunten a la abogada Yobana Carril. Que dicho sea de paso y como su nombre indica, es mujer...