Opinión
Por
  • TEÓFILO MARCO ESTELLA

Indignados

La generación joven condena a la generación adulta y le culpa de lo que va mal en el mundo. Los jóvenes se indignan fácilmente por las imperfecciones de los mayores y sobre todo de los que gobiernan el país. Así lo hicieron en el ayer los mayores de hoy, y los jóvenes de hoy serán criticados el día de mañana por otros jóvenes. Y todo esto porque no somos perfectos los hombres por nuestros vicios capitales que todos llevamos dentro de nosotros. Por ellos se ven y se notan en la sociedad actos de soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia, pereza. Estos vicios son el legado que nos dejaron Adán y Eva por no obedecer a Dios. Cuentan que caído en desgracia Hernán Cortés, arruinado y maltrecho, tuvo ocasión de ver al rey Carlos, este le preguntó quién era, el conquistador de Méjico le contestó: "soy un hombre, señor, que os ha ganado más provincias que ciudades os legaron vuestros padres y abuelos." Para bien o para mal una generación tras otra deja su legado y todos somos responsables de ello, así que no solo hay unos culpables. Si yo en particular procuro ser mejor persona, y no ser esclavo de los siete vicios capitales, habrá un sinvergüenza menos en la sociedad. Dice el dicho o canción popular: "Cómo está el mundo señor Facundo, qué atrocidad? "El mundo es bello, lo hacemos malo los hombres, responsabilidad de todos es que no vaya a peor, y esto es tarea de jóvenes y mayores, de hombres y mujeres.