Opinión
Por
  • MIGUEL SÁNCHEZ TRASOBARES

El día después

Las aguas desbordadas del río de las pasadas elecciones del 28-A han vuelto a su cauce, tras la responsabilidad ciudadana, manifestada civilizadamente en las urnas de forma mayoritaria.

Porque, pese a que se presentaban las elecciones inciertas por la pulverización del bipartidismo histórico, el alto porcentaje de indecisos (que se estimaba en más del 30%), y la irrupción de una derecha tricéfala, el día después sigue siendo tierra de inquietudes en todas las fuerzas políticas.

Se especula que, ante el ruido tan monstruoso montado por la derecha, la equivocada estrategia del joven líder popular, y el abierto y desagradable enfrentamiento entre las 3 propias formaciones, una mayoría de votantes ha acabado por apoyar al presidente y candidato vencedor, como ha sido el mandatario socialista.

Y es que, habiendo sido este capaz de gobernar durante 10 meses el país con una minoría formada de tan solo 84 diputados a base de pactos, tras la algarabía de haber logrado vencer ahora con 123 escaños, más fácil se le presenta que antes para llegar a cumplir el mandato de cuatro años, eso sí, tras las oportunas negociaciones.