Agrupación Astronómica, del suelo al infinito

La Agrupación Astronómica de Huesca celebra hoy sus bodas de plata con su característica humildad y la divulgación que ha sido uno de sus principios fundamentales desde sus orígenes. Conocimiento y observación a través de la palabra de Carlos Garcés y de los telescopios que mostrarán el firmamento desde la plaza de Navarra. Toda una metáfora de la relación entre el ser humano y su avidez para desgranar tanto el origen como la inabarcable verdad exterior, esa que ha seducido a sabios desde Tales de Mileto, Platón, Aristóteles, Copérnico, Galileo Galilei y Einstein, y que revela la relación científica entre esta disciplina y otras como la física, la química, las matemáticas, la biología, la meteorología, la arqueología, la filosofía y hasta el derecho, sin contar también las interacciones que determinados pensadores han establecido con la propia religión. Ha sido de tal calado y tal apasionamiento la búsqueda de respuestas, que es uno de los espacios en los que se han librado los duelos más intensos en la oratoria e incluso en la acción.

El magnetismo que produce la astronomía ha contribuido al crecimiento espectacular de la Agrupación oscense, que se inició con poco más de una treintena de estudiosos para llegar en la actualidad a los seiscientos, que trascienden la capital altoaragonesa para expandirse por la provincia y por Zaragoza. Con los pies en el suelo, bien asentados para no perder detalle gracias a una curiosidad que le arraiga con lo mejor del humanismo, los miembros de esta asociación han celebrado hitos extraordinarios, han disfrutado de la instalación del Espacio 0.42 en Walqa en cuyo alumbramiento fueron determinantes, han multiplicado sus esfuerzos organizativos y han demostrado que, cuando se mira alto, se llega mucho más lejos. Van hasta el infinito y más allá. Enhorabuena.

Diario del AltoAragón