Opinión
Por
  • JOSÉ SÁ

Y de perdonar....

Lo que más nos interesa a la gente, o mejor dicho, lo que más nos hace falta es que el páis funcione en beneficio de todos, aunque lo vemos cada día peor, piensan igual, es una pena oír y hablar continuamente de los mismos temas, política y economía. No deberíamos aguantar las barbaridades que dicen de todo lo antiguo, ahora, hasta de la edad del medievo están revolviendo todo lo que sea insultante, sacar trapos sucios les encanta, avivar el odio de las dos Españas es algo ilusionante para muchos. ¿Pero cuántos cientos de años hace falta para perdonarse en este país? El envangelio nos dice, perdonar setenta veces siete, pero parece que usamos muy poco el evangelio, no les interesa a muchos empecinados "en el no, es no", demasiadas veces se desfogan con todos los males, lo bueno no lo tienen asumido... Por ejemplo: los que dicen que defienden al pobre, al trabajador, son los que se han hecho y se hacen ricos. Más valdría que dejaran de engañar a la gente por la TV y en la calle, siempre los mismos, hundiendo la moral de la gente honesta. Y sino, lean qué es y cómo deberían comportarse los políticos actuales tan democráticos que dicen y cacarean. La libertad política de un pueblo sucumbe sin los frenos en la vida moral, intachable. Amar no consiste en amar el uno al otro, sino mirar los dos en la misma dirección. Ven a mi corazón y yo te dará los ojos para ver, proverbio chino. Señor: dame una buena digestión y, naturalmente, algo que digerir, dame la salud del cuerpo y el buen humor necesario para mantenerla. Dame un alma sana, señor, que tenga siempre ante los ojos lo que es bueno y puro; de modo que ante el pecadono me escandalice, si no que sepa encontrar el modo de meditarlo. Dame el alma que no conozca el aburrimiento, los ronroneos, los suspiros ni lamentos. Y no permitas que tome demasiado en serio, esa cosa entrometida que se llama "el yo". Dame señor el sentido del buen humor, dame el saber reírme de un chiste para que sepa sacar un poco de alegría a la vida y pueda compartir esa alegría con todos los demás, amén.