Opinión
Por
  • Diario del Altoaragón

Talento y actitud para una misión compleja

Dibujó ayer el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, el complejo panorama que afrontan los diez consejeros de cuatro partidos consecuencia del pacto alcanzado después del tiempo exigido para tan difícil composición, lo que ha provocado, como aseguró en una expresión de la realidad, reacciones contrapuestas en la sociedad. El inquilino principal del Pignatelli, que reincide en su mandato al frente de la comunidad, demandó de los titulares de las distintas áreas talento y actitud para responder a las expectativas en ellos depositadas.

Fue un acto de posesión del ejecutivo ajeno a los espectáculos que se aprecian en otras instituciones, con el respeto a la fórmula de 1978 como confirmación de la vocación de reconocer el valor de las bases de la convivencia que se cimentaron hace más de cuarenta años. Y, sobre todo, constituyó una manifestación de compromiso, de autoexigencia y de reivindicación respecto a otras instancias. Junto a los dos vectores del desarrollo estatutario y del impulso del empleo mediante la optimización en los sectores estratégicos, Lambán apuntó la urgencia de trabajar en el presupuesto de 2020 para que entre en vigor el 1 de enero y la necesidad de acordar con el futuro gabinete de España -todavía en el limbo- las actuaciones para una Agenda 2030 con sus dieciséis objetivos para un progreso sostenible medioambiental y socialmente. El programa de gobierno será colgado en el Portal de Transparencia y en él también se incluirá el aprovechamiento de los programas de la Unión Europea. Será un gobierno que precisará de mucho diálogo y entendimiento, para focalizar la planificación y la acción en las oportunidades que se abren para los ciudadanos en un escenario riguroso, volátil e incierto en el que vindicar un papel central en el Estado.