Opinión
Por
  • VENANCIO RODRÍGUEZ SANZ

Las baldosas de mi pueblo

Mi pueblo es muy especial. La gente es tan diferente que en ocasiones me cuesta pillarlos. Verán: "Resulta que allí las aceras están en muy mal estado: hay muchas baldosas que se mueven. La gente se queja mucho, pero el Ayuntamiento no hace nada al respecto porque dice que no hay presupuesto para ello. Pues bien, don Mariano (el cura), un día fue al Ayuntamiento para hablar con el alcalde. Éste, muy gustoso lo recibió en su despacho y lo invitó a que se sentara. Don Mariano se sentó y le dijo: "Mire usted, Sr. alcalde, que las señoras del pueblo me confiesan que tropiezan mucho." El alcalde se echó a reír al oír esto. Y don Mariano enseguida le reprendió diciendo: "Pues usted no se ría porque su mujer es la que más tropieza". La verdad es que no comprendo nada, ¿usted qué opina?