Opinión
Por
  • VENANCIO RODRÍGUEZ SANZ

Excursión al pico Bernatuara

Como si tal cosa, este fin de semana salvamos a una dulce y angelical doncella de morir a manos del malvado gigante Bernatuara (2.515 m). Como si nada, cruzamos el encantado puente medieval de Bujaruelo, no sin antes santiguarnos. A brazo partido, trepamos por la GR 18 hacia el puerto de Bujaruelo. Después de derrotar en singular batalla a varios Trasformers: unos convertidos en puente mecánico y otros en torre de alta tensión. Más adelante nos salió al paso uno que decía ser el refugio de Plana de Sandaruelo (1.660 m); que nos quería embriagar con cantos de sirena, pero nos mantuvimos en nuestro lugar para no herir sus sentimientos. Después de regar el camino con nuestra "sangre, sudor y lágrima" Churchill, llegamos al ibón de Bernatuara (2.305 m). Desde allí podíamos escuchar los exabruptos que el coloso Bernatuara nos dedicaba. Mas nosotros, impertérritos, enérgicamente le replicábamos con arrumacos, halagos y lisonjas, hasta que el pobre monstruo, agotado, no tuvo más remedio que rendirse diciendo así: "¡No lo puedo resistir más, me habéis vencido!" Por buenas composturas, el endriago nos entregó a la muchacha inmaculada. Con presteza la bajamos a San Nicolás y la llevamos a las autoridades competentes. Desnivel. 1.062 m. Distancia: 12 Km. Tiempo: 7 h. Para este trayecto se recomienda ir bien calzado de resistencia y capacidad para aguantar el síndrome de Stendhal.