Opinión
Por
  • JAVIER BELLOSTA

Aute in memoriam

Adiós Inés de Ulloa, me voy para Lisboa, me apunto de soldao, en la revoluçao...

Adiós Luis Eduardo, te vas para Albanta, te apuntas de paloma de escarcha en la imaginación.

Te vas con un Aleluya de cantautor de las narices recogiendo las rosas en el mar que por fin has encontrado. Ha nacido el muerto que dentro de ti se vertía al alba.

De alguna manera tendrás que recordarte porque ya te has desnudado sin esperar un poco más.

Si toda la vida es cine qué no será la muerte. Quizás en ella los sueños sean también cine y con James Dean y Antoine Doinel tires piedras en pantalones cortos bajo la batuta de Trufaut... Esta vez has sido tú el que encajado el directo como el perfecto estúpido que eres pero seguro que podrás organizar lo de los tres.

Quedará la música sin vestido, sin flores y sin trampas en ese día en el que tan solo pasabas por aquí.

Ya sé Luis Eduardo que todo es mentira pero recuerdo una noche en la que todo parecía verdad cuando tus poemigas volaban fugaces entre los cipreses del patio del museo de Huesca.

Las colillas han llenado ya mi cenicero residual y te tengo que dejar que ya son las cuatro y diez.