Opinión
Por
  • CONCHITA DEL MORAL HERRÁNZ

Manos a la obra

Hemos de actuar y todos a una como Fuente Ovejuna, pues las quejas si no van acompañadas de la lucha por las actuaciones que aportan bien a los demás, son vanas, no sirven, son desahogos inútiles.

Los medios de comunicación nos informan con puntualidad de los sucesos y hay algunos casos que se les da mucho realce y se silencia otros que interesan más a los ciudadanos. Que si han matado a su mujer el marido, que si a la hija etcétera, y sin embargo se silencian las grandes masacres de Kenia, México, Siria etcétera, solamente por ser cristianos.

El consejo de seguridad de la ONU ha de moverse para poner los remedios oportunos para acabar con éstos vergonzosos homicidios, familias con sus niños que tienen que abandonar s país huyendo, pasando mil penurias y sin encontrar cobijo, muriendo en el mar o en los campos.

Tenemos que reflexionar, ser más humanos y en la medida que podamos echarles una mano.

Salgamos de nuestro egoísmo y respetemos a los demás. Las buenas obras siempre perduran.

Termino con una frase de Lewis Carroll: "Uno de los secretos de la vida es lo que realmente vale la pena hacer; es lo que hacemos por los demás".

Pues, manos a la obra, como dice el refrán.