Al pan, pan; y al vino, vino

Amiga Conchita, aunque no te conozco personalmente, creo eres una excelente persona y con grandes valores, pero al pan, pan y al vino, vino.

Hoy día, hay que hablar con una claridad meridional; hay que fomentar el espíritu del trabajo y la disciplina, para eso hacen falta muchos valores; morales, éticos y religiosos. Vivimos en un país de apesebrados y estómagos agradecidos, cuyos políticos (la mayoría) solo piensan en el partido y sus medallas; bailándoles el agua gran cantidad de periodistas. La Administración, como su nombre indica, debería estar para administrar y gestionar, nunca para dar dineros (salvo causa de fuerza mayor). Al paso que vamos, y con la clase política que tenemos, vamos caminando hacia el precipicio.

Termino. ¿Te suena esta frase, Conchita ¡La verdad os hará libres!?