Opinión
Por
  • Diario del Altoaragón

El interesante punto de vista de los veterinarios

Tienen tras de sí una experiencia y una hoja de servicios como profesión que les otorgan una legitimidad y una autoridad para afrontar problemas que afectan a la salud de las regiones, los países y la humanidad. Han estado al frente de la toma de decisiones de crisis sanitarias muy graves, globales, que en muchos casos no han llegado a ser pandemias precisamente por su preparación para un aspecto fundamental para el bienestar del ser humano: la prevención. Por eso el Consejo General de Colegios Veterinarios de España ha dado un nuevo paso adelante para recordar que, en el inicio de la emergencia del coronavirus fueron consultados como conocedores profundos de la epidemiología y de la zootecnia. No en vano, salvo algunas teorías conspiranoicas, y dentro de las profundas incertidumbres que nos rodean, es una evidencia que el origen del virus es animal.

Los resultados de anteriores amenazas, en las que los veterinarios tuvieron un rol fundamental al frente de las operaciones, avalan la necesidad de que su disponibilidad sea atendida. Nos rodean demasiadas preguntas como para persistir en una dirección piramidal de la lucha contra el coronavirus, porque, si bien ha quedado contrastada la eficiencia de quienes están en la base de la resistencia con su atención médica, existen legítimas dudas sobre el conocimiento de la parte más alta -en gran medida, por supuesto, porque el conocimiento científico va por detrás de la contagiosidad del virus-. Un ejercicio de humildad y de pragmatismo ha de guiar esta nueva etapa en la que miramos con esperanza hacia la vacuna pero no podemos descuidar la aplicación de todos los medios en una batalla que exige aportaciones interdisciplinares. "Una sola salud" es la clave, la enseñanza de la casuística de lustros y esta que es reciente y demoledora.

Diario del AltoAragón