Premio Pyme, referentes para elevar el ánimo

En nuestra contraportada, Víctor Kuppers asegura que necesitamos sacar el ánimo para extraer lo mejor que llevamos dentro, conscientes, sin embargo, de que lugares comunes como la pretensión de que las crisis abren todo un crisol de oportunidades representan un voluntarismo apenas razonable porque, además, puede inducir a la confusión y a una cierta frustración. Los empresarios tienen una habilidad singular, por la observación de sus trayectorias, para entender las coyunturas, y son conscientes de que hoy es imperativo trabajar más, mucho más, innovar en mayor medida, motivar más a sus colaboradores, comprometer a los grupos de interés y, al final, el resultado será inferior al deseable, pero al menos contribuirá a establecer un puente hasta otra etapa de bonanza.

La entrega de los Premios Pyme Huesca del Banco Santander y Cámara de Comercio representaron un canto coral tanto a la esperanza como al realismo. Partiendo de la situación, todos los galardonados hicieron uso de la palabra para reconocer las dificultades que atraviesan en tiempos de la pandemia, cuando el consumo se ha desplomado y las restricciones suponen importantes obstáculos para conquistar más cuotas de mercado, mientras todos sus gastos fijos y los impuestos se mantienen inalterables. Eso sí, en todas las alocuciones se expresó la responsabilidad que los directivos y sus equipos tienen suscrita con la comunidad a la que prestan sus servicios y a la que están haciendo crecer a golpe de riñón, de talento y de voluntad. Como afirmó Ángel López, máximo responsable de la zona de la entidad bancaria, cuando se invierte en favorecer la actividad empresarial, se está apostando por empleo, por riqueza y por una sociedad que camine, desde el emprendimiento, hacia un mayor progreso.