Ni el más pesimista de los mortales pudo imaginar el pasado día 1 de enero, justo cuando todo el mundo estaba dando la bienvenida a la nueva década en medio de la alegría y de los juegos artificiales, la película de terror en forma de maldita pandemia que nos iba a deparar el año 2020.

Porque, a lo largo de estos últimos 12 meses que acabamos de dejar atrás, este virus procedente del continente asiático, ha logrado no sólo paralizar las economías de todos los países del planeta, sino lo que es aún peor, dejar oficialmente 80 millones de contagiados -aunque el número oficial es sin duda muy superior- y, llevarse por delante a más de 1,7 millones de personas.

Y es que en una economía globalizada como la nuestra, el que las naciones del planeta se hayan pasado olímpicamente por el forro los avisos de los científicos durante décadas del riesgo de una pandemia mundial, ha supuesto que deprisa y corriendo se hayan tenido que poner las pilas para luchar denodadamente contra el enemigo común e invisible de la covid-19.

A ver si, pese a que "el hombre es el único ser que se tropieza dos veces con la misma piedra", sirve de ¿escarmiento?.