Opinión
Por
  • ANTONIO LASHERAS

¿Dónde está el espíritu crítico de la sociedad?

En nuestros días, en el pasado y en el futuro, siempre habrá crítica constructiva y destructiva? En estos momentos de opiniones divergentes y con discrepancias continuas, necesitamos en España opiniones críticas y constructivas, que den luz en la gran oscuridad que estamos inmersos en este final de año 2020.

Estamos experimentando una sociedad dormida para unos y otra sociedad atemorizada para otros. ¡Si todos pensamos que no podemos cambiar la sociedad no la cambiaremos! Una persona desinformada, no piensa, no analiza, no descubre el porvenir del mañana, solo el hoy tiene sentido, sea bueno o malo.

El autentico demócrata ha de luchar hasta el final para descubrir la verdad.

Una mayoría desinformada, crea una sociedad sin proyectos propios. "Sus representantes ya cubren este vacío", un vacío que jamás será destapado por una masa social desinformada.

El estar aletargados, facilita el juego político para abrir los caminos hacia lo desconocido y cerrarlos a todo aquello que nos pudiera descubrir la verdad.

Por otro lado nos encontramos con una parte pequeña de la sociedad, que sospecha, que intuye, que la desinformación es un analgésico para que la sociedad duerma y cierre los ojos el máximo tiempo posible, y desean abrir brecha en los muros infranqueables del poder, pero también saben que un grano de arena solo no es capaz de cambiar la playa, pero es de esperar que juntando muchos granos de arena, una parte importante de la playa quedara debilitada.

Los colectivos más grandes o más pequeños desinformados, son inevitablemente los que renuncian a descubrir la verdad.

Una sociedad desinformada es un peligro permanente por ser incapaz de controlar en menor o mayor medida al poder establecido.

Hoy más que nunca hay que pedir: despierta caminante, que se abre camino al andar.