Opinión
Por
  • PILAR VALERO CAPILLA

Las emociones

Sin emociones la memoria no funciona.

Diógenes se levantó por la mañana aspirando los olores que creía agradables.

Su vista recorrió la habitación, sus manos acariciaron su cuerpo enjuto sin conseguir emoción.

Un perro pulgoso ladraba, frotándose en sus tobillos.

La radio dio la noticia del confinamiento un mes más.

Diógenes se emocionó pensando en las basuras que podría conseguir, colchones, mesas, sillas, cacerolas, ropa y comida para él y su perro.

Por la noche paseaba por el barrio descubriendo sus tesoros ¡Qué gusto le daba!