Opinión
Por
  • ROSA SERRANO (SENADORA SOCIALISTA POR LA PROVINCIA DE HUESCA)

Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia

En el momento en el que nos encontramos, hablar de ciencia es hablar de vida, esperanza y futuro. La pandemia en la que estamos inmersos nos ha dado varias lecciones, entre ellas la importancia y la necesidad de la ciencia, la investigación y la tecnología, y en ese campo la mujer no puede quedarse atrás porque nos jugamos el futuro como sociedad y como país.

Hoy, 11 de febrero volvemos a promover la igualdad en la participación de la mujer en la ciencia y en la tecnología, porque a pesar de los avances en el papel que las mujeres desempeñan en estos campos, todavía siguen existiendo barreras formales y prejuicios sociales que acaban con vocaciones científicas de muchas jóvenes investigadoras. Y es que los datos que en estos días estamos conociendo vuelven a manifestar que los obstáculos son notables y que las mujeres siguen infrarrepresentadas no solo en muchas de las áreas científicas, sino también en los diferentes ámbitos de gestión y decisión de estas disciplinas.

En España, las mujeres representan un 54% de la población universitaria, sin embargo, cuando se pone el foco en las carreras técnicas, las alumnas solo representan una media del 24% y en las Tecnologías de la Información y la Comunicación esa representación baja hasta el 10%. En los ciclos de Formación Profesional también existen varias familias profesionales relacionadas con la tecnología y la ciencia, y en muchas de ellas el porcentaje de mujeres es aún más bajo que en los estudios de Grado. Una situación injusta e ineficaz si queremos un futuro basado en la igualdad entre hombres y mujeres. Es imprescindible el empoderamiento de las mujeres en la ciencia, la tecnología y la innovación, y es importante su participación plena en estos ámbitos.

Conviene recordar que esta situación supone un retraso en el desarrollo social, porque significa la pérdida de talento y capacidad de futuras científicas e investigadoras. Comencemos por despertar en las jóvenes el interés por la ciencia, por suprimir los roles que dan género a los distintos campos laborales, y pongamos de ejemplo a las mujeres que en el pasado o en la actualidad han elegido este camino, hagamos que las niñas de hoy tengan un ejemplo a seguir para promover su vocación y su futuro.

Porque es posible, y es responsabilidad de todos abordarlo de una manera trasversal. Firme es el compromiso que tiene este Gobierno en implementar la perspectiva de género en todas sus instituciones y ministerios, ejemplo de ello el Ministerio de Ciencia e Innovación, donde en el marco de sus competencias está la de eliminar cualquier forma de discriminación todavía existente y hacer efectiva la igualdad entre hombres y mujeres en los ámbitos de la Ciencia y la Innovación.

Muestra de ello es también la reubicación en su gabinete de órganos o unidades como el Observatorio Mujeres, Ciencia e Innovación, o la Unidad Mujeres y Ciencia, creados ambos para abordar, fomentar e impulsar la igualdad y perspectiva de género, haciendo un seguimiento con el objetivo de mejorar la situación de las mujeres en el Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación.

Las líneas de actuación deben ir en torno a la captación de talento femenino, visibilizar esos referentes y promover medidas dirigidas a terminar con los obstáculos, los estereotipos y sesgos de género, la conciliación de la vida familiar y laboral y el techo de cristal.

En un futuro la oferta laboral estará centrada en sectores tecnológicos, esa demanda será imposible abordarla sino incorporamos a más mujeres al mercado de trabajo especializado en torno a la tecnología. Por lo tanto, es imprescindible lograr una presencia equilibrada de hombres y mujeres en esos puestos con oportunidades de trabajo y bien valorados económicamente, con ello se contribuiría a disminuir la segregación del mercado de trabajo, y la brecha salarial presente en este ámbito.

Queremos un país con futuro, un país con ciencia e igualdad, por eso desde el Partido Socialista apostamos por una participación plena, igualitaria y sin barreras.