Hoy toca procesionar
CRISTO padeció por vosotros, dejándoos un ejemplo para que sigáis sus huellas”. Hoy toca procesionar. La Cofradía del Cristo de los Gitanos dio la salida el domingo, y todos vamos en secuencia hasta el Santo Entierro y la Resurrección. El miércoles es el turno de nuestra Cofradía de Santiago y el impactante paso de La Enclavación. Penetró Felipe Coscolla en lo más profundo de la crucifixión en el monte Gólgota, taladradas las manos y los pies del Señor, poderosos los músculos del romano, SPQR, sobrecogedora la imagen de la virgen con el consuelo imposible del apóstol. Repetimos el rito año tras año, a golpe de mazo con los portadores del conjunto, impolutos, con las galas para la oración y el acompañamiento a Jesucristo. Cada gesto rezuma espiritualidad. En el origen, mientras Manolo se erige en cuidador de peregrinos (la túnica y el capirote perfectamente alineados), cada uno se ocupa de hacer el nudo que ratifica que suma el acompañamiento al sacrificado. Genuflexión, una mirada al cielo, nos persignamos mientras rezamos y emprendemos, entre golpes de mazos, un recorrido que parece externo y, sin embargo, es profundamente interior.
Cada procesión es recogimiento. encuentro espiritual a través de la trascendencia del amor divino. Un viaje intenso, emocional, a la esencia de nuestro ser, a la consciencia de esa conversación con el Supremo a través del rezo, de las miradas empáticas con la pasión de Jesucristo a través de las oquedades del tercerol, con la que han padecido nuestros prójimos (hoy recordaré a mi inolvidable Ramón Justes, año ha de su partida). Hoy, con mis compañeros, procesionaré. Semana Santa en su pureza. Un abrazo fraternal a todos los cofrades del Alto Aragón. l