La vivienda en el medio rural

LA DESPOBLACIÓN se ha convertido en un asunto crucial en Europa. Pero mientras se siguen analizando las causas, como si no se supieran, y proponiendo decenas y decenas de medidas, que no acaban de materializarse, hay una realidad con la que se da de bruces el que toma la decisión de irse a vivir al medio rural. A veces se emprende el camino con la idea idílica de encontrar una casa con jardín donde ver crecer a sus hijos en contacto con la naturaleza y se encuentra con que no hay casas disponibles ni para venta ni para alquiler o están en muy mal estado.

El presidente de la Diputación Provincial de Huesca ha elevado al Estado propuestas para modificar la legislación y que los ayuntamientos tengan mayor capacidad para intervenir y poner vivienda a disposición. Mientras tanto, ha abierto líneas de ayuda a los municipios para que rehabiliten viviendas para alquilar con un precio máximo. Hoy, es el alcalde de Boltaña quien asegura que el municipio ganaría población si hubiera más vivienda. En una localidad con muchos servicios como la sede comarcal, el juzgado, un cuartel de la Guardia Civil con base del Greim, bomberos del Servicio de Prevención de Incendios y Salvamento (Speis), la base helitransportada y muchos establecimientos turísticos, es muy complicado encontrar una vivienda.

Sucede en otras localidades turísticas como Aínsa, Benasque o Sallent, pero también en pueblos con una situación distinta. En La Litera, la ingente oferta de empleo en mataderos o granjas genera el mismo problema y en núcleos donde no hay ni una cosa ni la otra tampoco hay promotores que se atrevan. Sea por unas u otras causas, urgen soluciones para aumentar la oferta de vivienda en el medio rural.

Diario del AltoAragón