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  • Diario del AltoAragón

El CDAN debe crecer

Foto aérea del CDAN
Foto aérea del CDAN
Javier Romeo Francés

La finca del pintor José Beulas se ha abierto por primera vez al público a visitas guiadas que se han completado, lo que indica que curiosidad que suscita este espacio vallado entre el puente de la autovía y el CDAN por la salida a la A-131 (hacia Ayerbe). En esta área, residió durante muchos años con su esposa, la oscense María Sarrate, y de ahí surgió, vinculado a su legado artístico a la ciudad, la creación de un museo que, a pesar del gran trabajo, siempre lucha por sobrevivir.

Al centro se le quiso llamar Museo Aragonés de Arte Contemporáneo, pero ahí comenzaron los problemas, porque el nombre sonaba demasiado completo para dejárselo a Huesca, así que finalmente se denominó Centro de Arte y Naturaleza (CDAN), vinculado a la colección del mismo nombre iniciada por la Diputación Provincial de Huesca. En 1999 se creó la Fundación Beulas, en 2000 se constituyó el primer patronato y el centro se inauguró el 27 de enero de 2006. Tras unos primeros años con más presupuesto, la crisis económica lo dejó en niveles de mera supervivencia. Es complicado mantener un centro abierto sin apenas personal y sin dinero suficiente para organizar una programación que resulte atractiva.

Solo el continente, diseñado por el arquitecto Rafael Moneo merece una visita. El edificio se construyó orientado a la finca que ayer se abrió al público para establecer una conexión. De hecho, en el espacio central, se proyectó una segunda fase, diseñada por el arquitecto oscense Sixto Marín, que colaboraba con Moneo. En el interior de la finca, además de numerosas esculturas, se encuentra el estudio diseñado por García de Paredes, que siempre lo visualizó para residencias artísticas. El espacio tiene conectarse con el CDAN y abrirse a la ciudad, pero no solo por un día.