Opinión
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  • Diario del Altoaragón

Primer lleno

Lleno en la plaza de toros para ver la muestra del Ejército y la Guardia Civil.
Lleno en la plaza de toros para ver la muestra del Ejército y la Guardia Civil.
Pablo Segura

EL LLENO de la plaza de toros de Huesca en la tarde ayer para ver la exhibición de personal y material de las Fuerzas Armadas, como uno de los actos del programa de celebración que culminará mañana con el gran desfile presidido por los Reyes de España, es la mayor evidencia de que la ciudad quiere conocer y quiere, sin más, a su Ejército y a los cuerpos de seguridad del Estado. Con este preámbulo, se espera un desfile masivo ya que, a la expectación que están generando los profesionales, se suma la visita de los reyes Felipe VI y Letizia.

La ciudad ya está totalmente vigilada en la cuenta atrás para el momento más esperado del año en las Fuerzas Armadas, el desfile en el que se despliegan todas las capacidades del Ejército de España. Pero este año va a ser especialmente emotivo, precisamente porque la celebración del acontecimiento en Huesca marca la vuelta a la normalidad, tras dos años sin poder organizarse por la pandemia.

La celebración del Día de las Fuerzas Armadas será un gran escaparate para la ciudad, cuyo nombre sonará y se escribirá en todos los medios de comunicación que llegarán para cubrir la celebración del Ejército más importante del año.

El movimiento en las calles de militares y agentes de otros cuerpos para velar por la seguridad se ha incrementado en las últimas jornadas, a medida que se acerca el desfile. La ministra Robles, que también asistirá al acto, ha mantenido en este tiempo la promesa de que se celebraría en Huesca. Si algo pone en evidencia la respuesta de la ciudadanía, es de que la reapertura del cuartel Sancho Ramírez, como se reclamó con protestas en la calle, con el traslado de la División Castillejos, ha sido una gran decisión.