Huesca vuelve a la vida

HUESCA VIVIÓ ayer un momento para la historia y para el recuerdo de cada uno de los oscenses y visitantes que estallaron de alegría con el lanzamiento del cohete de las fiestas de San Lorenzo, tras dos años suspendidas por la pandemia. Una plaza de la catedral repleta de gente de todas las edades unida por los mismos gritos de ‘guerra’, ¡Viva Huesca! y ¡Viva San Lorenzo!, constató lo que ya se sabía, que había ganas de fiesta. Cientos y cientos de personas llenaron las calles y los diferentes escenarios de la ciudad a lo largo del primer día festivo tras casi 1.000. Huesca volvió a vivir la fiesta, pero sobre todo a confirmar su grandeza: una celebración popular que se respira en la calle. Huesca renace con el disparo del cohete y late al compás durante siete días, hasta la medianoche del 15 de agosto.

Volver a ver la plaza de la Catedral llena emocionó a muchos oscenses que sonrieron o lloraron, dos reacciones distintas pero, a veces, expresión de un mismo sentimiento. Las ganas de formar parte de lo que se convierte en un todo en esta ciudad durante estos días hizo que hubiera más gente que nunca en uno de los momentos que más ansían los oscenses, especialmente los jóvenes.

DIARIO DEL ALTOARAGÓN recoge cada día en estas páginas ese latido de Huesca que impulsa, que ilusiona, que genera un sentimiento de pertenencia a una comunidad, que alienta ese fervor religioso que hoy se sentirá de nuevo en la mañana de San Lorenzo. Además, el Extra laurentino recorre el programa festivo con sus protagonistas pero también con ciudadanos más anónimos sin los que no habría fiesta. Que no se pare la fiesta, en la ciudad que ahora tampoco duerme.