Opinión
Por
  • José Sanmartín Sopena

Asesores sin ideas

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo.
Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo.
EFE

Los ciudadanos entienden que los políticos han de tener asesores, pero muy pocos y muy buenos, no legiones de asesores, que se distinguen por no hacer bien su trabajo (no asesorar). El Gobierno de España tiene mucho trabajo sin hacer y muchas cosas por arreglar. Voy a citar unas cuantas.

Las pensiones

No debemos olvidar que las pensiones son derechos adquiridos, a lo largo de una vida laboral, por las cotizaciones abonadas.

Obviamente, las pensiones han de ser justas y para su cálculo, se han de tener en cuenta los años cotizados, el grupo de cotización y el régimen al que se ha cotizado (general, autónomos, agrario, etc.).

Para no perjudicar a nadie, al calcular las pensiones, se deberían sumar todas las cotizaciones que haya abonado el futuro pensionista. Eso no se hace exactamente así, con lo que hay pensionistas que resultan perjudicados. Hay pensionistas que no cobran la pensión máxima, habiendo cotizado cantidades muy superiores a los topes máximos de cotización. Para que todo el mundo lo entienda voy a poner un ejemplo práctico.

Supongamos que un trabajador ha trabajado en una empresa, como asalariado, con un horario de trabajo de 8 a 12 h. y de 13 a 17 h, cotizando en los grupos 1 ó 2. Ese mismo trabajador ha trabajado, como autónomo, de 18 a 22 h., en otra actividad. A la hora de calcular su pensión se suman las cotizaciones realizadas, pero no se tienen en cuenta las cotizaciones al régimen de autónomos, por coincidir con cotizaciones al régimen general. Cotizar como autónomo, para trabajar de 18 a 22 horas, en otra actividad, es obligatorio, por lo tanto, esas cotizaciones deberían servir de algo y no sirven de nada (no se computan). Lo anterior supone que hay pensionistas que cobran menos de la pensión máxima, habiendo cotizado por cantidades muy superiores al tope máximo. ¿Quién entiende eso?

Lo más lógico y más justo sería, que todo lo cotizado se sumase y que si se ha cotizado por cantidades superiores al tope máximo, se concediese la pensión máxima.

Es lamentable que, durante décadas, hayan pasado por los ministerios de trabajo y seguridad social, tantos ministros, subsecretarios, directores generales, etc., y nadie haya reparado en esta situación totalmente injusta. Tampoco los asesores han asesorado bien. No debe entenderse, por lo que acabo de exponer, que yo esté en contra de las pensiones no contributivas, ni de los complementos a mínimos, ni del ingreso mínimo vital, etc.

Estoy a favor de todas las mejoras que se puedan establecer para los trabajadores: subir los salarios, subir el SMI (hasta los 1500 euros, mínimo), disminuir las horas de trabajo, implantar más ayudas (por hijo menor de edad a cargo, progenitores a cargo, familiares con necesidades especiales, etc.). Si hay que tener en cuenta, que los empresarios ya tienen bastantes cargas sociales y cuando se pidan mas mejoras para los trabajadores, esas nuevas cargas han de ser a cargo del Estado.

Desempleados

Cuando un trabajador no tiene empleo, se debe suponer, que está en una situación, ni querida ni deseada, de falta de salarios.

Las situaciones de desempleo pueden paliarse, en parte, cobrando prestación o subsidio de desempleo. Pero su duración es limitada y cuando se acaba, pueden aparecer situaciones de necesidad (por falta de ingresos). Muchos trabajadores pagan alquiler por sus viviendas. Si se quedan sin empleo, lo lógico es que les falten recursos. ¿Nadie ha pensado que el trabajador en desempleo, no debería pagar alquileres, mientras dura esa situación? Obviamente es el Estado el que debería asumir esa obligación, ya que es el responsable de procurar que haya vivienda y trabajo para todos.

Trabajadores fijos discontinuos

Son aquellos que no tienen trabajo durante todo el año. Solamente tiene trabajo en temporadas determinadas de actividad de la empresa, el resto del año no trabajan. En ocasiones (siempre que no lo hayan agotado), podrán percibir la prestación o subsidio por desempleo (que es siempre muy inferior al salario que se percibe en activo). Esos meses de no trabajo, bajan los ingresos del trabajador, lo cual va en perjuicio de su familia. Al llegar la edad de jubilación, si se ha permanecido muchos años como fijo discontinuo, el tiempo no cotizado mermará mucho el importe de su pensión. Hay que recordar que hay trabajadores que llevan más de 30 años como fijos discontinuos (en la misma o en distintas empresas).

Los trabajadores fijos discontinuos, que paguen alquiler por su vivienda, deberían estar exentos de ello, en los períodos en que no trabajan. El Estado debería asumir esos pagos. Por la misma razón, durante los meses en que esos trabajadores no trabajan, se debería cotizar como si trabajasen (para no mermar sus pensiones). ¿Quién debería abonar esa cotización? Podría abonarla el Estado (o establecer un sistema tripartido: trabajador, empresario, Estado).

Lo que no es de recibo es no hacer nada y que las cosas se vean luego “a posteriori”.

Se requieren más niños/as

En España se requiere aumentar la natalidad. Según recientes noticias hay unos 6 millones de niños (y más de 13 millones de perros). Obviamente no se debe prohibir tener perros (ni mascotas), pero las cosas deben prepararse de forma que nadie pueda pensar: mejor un perro que un niño (por ese camino iremos mal). ¿No sería saludable un impuesto por cada perro o mascota? Si deciden establecerlo, debería estar muy bien calculado, para que la gente no se sienta agraviada. Habrá que hacer algo para animar a la gente a que tenga niños/as (biológicos o adoptados). ¿Qué tal una ayuda mensual por cada hijo, hasta los 16 años?

Esto no sería una novedad. Ya hubo en España ayudas por esposa y por hijos, así como premios a la natalidad, hijos habidos, hijos vivos, etc.

Los que mandan están para eso, pero también para cavilar y para implantar mejoras que vayan en beneficio de los ciudadanos.