Opinión
Por
  • Diario del Altoaragón

Un modelo de ciudad

Imagen de la capital oscense.
Imagen de la capital oscense.
D.A.

HUESCA retoma su proyecto de participación ciudadana con una segunda fase en la que se seguirá avanzando en una serie de talleres sobre las ideas recogidas en una primera toma de contacto con oscenses que aportaron sus opiniones. Bajo el nombre ‘La Huesca que queremos’, el proyecto H100 pretende que la ciudadanía aporte ideas al presente y al futuro. Según el alcalde, las propuestas recabadas “buscan alinear lo que es la preocupación de los ciudadanos con las decisiones estratégicas”. De hecho, cumplir con el programa electoral es ya un primer paso para que esa confluencia suceda, porque es de suponer que los votos y, con ellos, la confianza se deposita en un partido y otro en función de sus líneas marcadas. También es cierto que los pactos y formaciones de gobierno son los que a veces decantan la balanza. Pero nada de esto resta importancia a la necesidad de que existan cauces de participación ciudadana en todo momento durante los mandatos municipales.

Ahora, hay una oportunidad de que se escuche a la ciudadanía y el Ayuntamiento no solo es la institución más próxima sino que también incide de una forma muy directa en nuestra calidad de vida. No podrá hacer frente directamente a la inflación y a los precios de la energía, pero sí hacer más amable nuestro entorno más próximo. Si algo necesita la ciudad, es planificar proyectos que contribuyan al desarrollo económico y social, para lo que ya trabaja el tejido empresarial representado por CEOS-Cepyme Huesca, entre otros agentes. El proceso de participación ciudadana tiene que servir para aunar esa fuerza social y conseguir la ciudad que todos queremos: próspera en lo económico y con calidad de vida.