La carrera a las urnas

LA CARRERA hacia las urnas comenzó hace ya un tiempo y se va acelerando por momentos y a medida que surgen oportunidades de hablar en lenguaje preelectoral. Y sucedió ayer en el debate sobre el estado de la Comunidad Autónoma, que será el último de esta legislatura. El presidente de Aragón, Javier Lambán, apeló a la “estabilidad” del cuatripartito, recordando que al inicio “nadie daba un duro” por la coalición y no escatimó en elogios a sus socios a los que siguió llamando a la unidad. Entre ellos, fueron surgiendo los logros de su gestión y algunos anuncios, aunque parece que se guarda ases en la manga para la jornada de hoy en la que tendrá que lidiar con las críticas.

Tras su discurso, sin límite de tiempo y en el que invirtió una hora y cuarenta minutos, hoy será el turno de los portavoces de los grupos parlamentarios y tendrá la oportunidad de replicar. Pero el presidente se fijó especialmente en Zaragoza, a pesar de que todavía se desconoce quién será su rival en las elecciones de mayo. Sin saber si será Azcón o si este repetirá como candidato a la Alcaldía de Zaragoza, realmente el contenido le servía igual, porque incidió en que el Ejecutivo está invirtiendo mucho para potenciarla como referencia logística, además de impulsarla como ciudad del talento con la ubicación de un centro aragonés. Sí que hizo un guiño al resto del territorio con un problema común al que hay que hacer frente, al apuntar el reto de rehabilitar entre 300 y 400 viviendas vacías al año en municipios de menos de 2.000 habitantes en el medio rural, implicando a los cuatro niveles de la administración. Con todo, a la oposición le supo a poco y hoy se espera que salgan ideas y soluciones prácticas de todas las formaciones políticas.