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  • Diario del Altoaragón

El precio de la cesta de la compra

El ministro Luis Planas este jueves en la feria Figan de Zaragoza.
El ministro Luis Planas este jueves en la feria Figan de Zaragoza.
EFE/Javier Cebollada

LA FERIA FIGAN, que se celebra en Zaragoza hasta hoy, es un buen marco para pedir un “esfuerzo colectivo” a todos los componentes de la cadena alimentaria, desde el campo a la mesa, desde el sector primario a la industria alimenticia, más que nada por los asistentes. Sin embargo, quien lo pidió fue el ministro de Agricultura, Luis Planas, y entonces llama la atención porque en ese colectivo el Gobierno central debería situarse a la cabeza.

Cierto es que se han adoptado medidas, como la bajada del IVA a algunos alimentos, pero han sido poco efectivas y las familias han seguido notando la subida del precio de la cesta de la compra. Además, esta cuesta lo mismo a quien cobra el salario mínimo que a quien ingresa cuatro o diez veces más. Pero los precios del supermercado no engañan y un litro de leche que, antes de que la inflación se disparara, costaba 0,79 céntimos, ahora tiene un precio de 1,14 euros. Contra todo esto sí que tiene que haber un “esfuerzo colectivo”, pero este ahora recae sobre las familias: no gastar, quizá hasta no beber tanta leche, y ahorrar si es que eso es posible.

Los precios de la energía y de los carburantes, sobre los que poco puede hacer la cadena, han sido parte de la causa, así como en incremento del coste de los fertilizantes y otras muchas variables.

El dato del IPC de marzo ha caído al 3,3 %, por lo que es un buen augurio, aunque es un índice adelantado. Sin embargo, aunque parezca que este dato se modera, el coste de la cesta de la compra no parece que siga el mismo camino a largo plazo. La reflexión debe ser colectiva, pero el Gobierno central también tiene que adoptar medidas más efectivas.