María Pilar Faro: "Mis personajes nacen para morir, casarse o viajar en dos páginas"

JACA.- Lecturas para no lectores es el cuarto libro de María Pilar Faro. ¿Por qué un título tan contradictorio? "Los que ya han leído Cuentos a la sombra del monte Oroel, Faros en el Parque Grande o Relatos intrascendentes conocen la respuesta", dijo la jaquesa, que presentó la obra en la Casa de la Cultura.

"Se trata de una colección de relatos breves sin conexión entre ellos, ideal para los no muy aficionados a la lectura, que van a fardar una barbaridad paseándose con uno de esos libros bajo el brazo", aseguró la autora, con su característico humor. "Y si además lo leen, igual hasta les gusta", agregó.

El juglar, El secreto de Elena, El primer crucero, Superación, Un simple corte, La partida, Números, Amor en la cartera, Profesionales de la escena, Decisiones, La carta, Un día perfecto, Boira, Mi verdadera vocación, Gemelos, Perlas en el cielo, Mi muñeca, La historia de Alejandro, A la luz de la noche, Peio, Javier, Daniel, El relojero, El príncipe Jorge, El paso del tiempo, Preposiciones deshonestas, Pasatiempos, Iguácel, La voz, Peñaflor, El amor de un padre y El alumno son los 32 relatos.

De quedarse con uno, escoge el sexto, La partida, que invita al lector a viajar al Canfranc de 1942, cuando soldados nazis patrullaban por la estación ferroviaria. "Es el relato que quedó más redondo", según la jaquesa. No es la única alusión a la Jacetania. Iguácel trata sobre "una asistenta de Hecho que conoce al protagonista desde muy pequeño, habla con él en cheso y es muy gracioso".

Ramón, Coly, Verónica, Vika y Antón "tuvieron la gentileza de realizar los dibujos que ilustran algunos relatos". En este sentido, sobresale "el precioso dibujo" de su hermano, el también escritor y pintor Ramón Faro, que le acompañó en la presentación del libro, en el que plasmó la parte central de la estación de Canfranc.

Números hace alusión a su trabajo como profesora de Matemáticas en un instituto de Zaragoza, donde tiene como alumnas a Vika y Verónica. La portada del libro muestra un paisaje de Noruega, un país que conoció en un viaje familiar. "Estuve este verano y me encantó", dijo la jaquesa, que alude al territorio nórdico en A la luz de la noche.

"Quiero dar las gracias más sinceras a mis fieles lectores y recordarles que no voy a escribir ninguna novela. Mis personajes nacen para morir, casarse o emprender un viaje a Palencia en un par de páginas", dijo María Pilar Faro, que se define como "una diletante, una cuentista que se lo pasa bien escribiendo".

"Mientras me lo pase bien y a la gente le guste, seguiré escribiendo", añadió la jaquesa, que tiene "algunas ideícas" para el quinto libro, pero no se pone plazos. Agradece la labor de sus familiares Belén, Ramiro y Alfonso con las correcciones y el montaje, así como el trabajo de fotografía de Daniel. El libro tiene 80 páginas y es una autoedición. Se pueden encargar ejemplares en el correo faroroel@hotmail.com.