FERIA
Barbastro celebra una de las ediciones más populares de los últimos años de su feria de La Candelera
Se han dispensado todo tipo de productos al público a través de 305 puntos de venta
BARBASTRO.- Los últimos feriantes que participaron en La Candelera han terminado satisfechos porque ha sido una de las más populares de los últimos años por la coincidencia del sábado y porque está entre las "citas marcadas en rojo en el calendario" como ha indicado un feriante veterano.
"Si hablamos de La Candelera son palabras mayores", ha explicado tras recordar que, en efecto, es la más antigua que se celebra desde la concesión real de Germana de Foix el 22 de septiembre de 1512 y los efectos son perdurables.
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Una fecha que conocen los alumnos de los colegios que se esmeraron en las propuestas para financiar viajes de estudios a Italia y a París, entre otros. "La gente compra y los bocadillos tienen buena aceptación, las tapas de tortilla casera, también y los dulces" ha explicado Merche, profesora del colegio San Vicente con experiencia de muchas "candeleras".
Referencia que podría incorporarse a los productos que elaboran Victoria y Antonio al amparo de la marca Biarritz (1903), "es una buena jornada para que la gente deguste y compre, se notan los efectos del sábado y aunque hace un poco de brochina, vale la pena estar en la calle".
En la capilla del Santo Cristo, en la Catedral, el vicario general del Obispado, Ángel Noguero, se ha estrenado en la bendición de candelas (7.000) y de caretas (3.400) antes de que el Grupo Tradiciones con Elita Davias al frente las repartiera en la Plaza del Mercado donde no dieron abasto.
Ángel ha explicado el significado de la bendición de candelas. "Jesucristo es luz y la entrega de una candela es luz allí donde esté, como el día del bautizo, la confirmación y también en la despedida. Es la luz que nos conduce".
El testimonio religioso ha sido "puerta abierta" hacia la calle donde se han distribuido 305 puestos de venta, en zonas, por Avenida de Navarra, Coso, General Ricardos, San Ramón, Corona de Aragón, Avenida de los Pirineos, puente del Amparo, plazas del Sol, Diputación y Mercado.
La feria ha sido, más que nunca, encuentro de gentes procedentes de toda la comarca, de Salas Altas en menor número porque celebraron la festividad patronal de la Virgen de la Candelara y "son palabras mayores" como indicó un vecino.
La jornada ha sido ideal para políticos de casi todos partidos que han aprovechado el "escaparate" para darse vueltas en una cita con aromas pre-electorales.
En medio de gran ambiente, el alcalde Antonio Cosculluela, que lleva muchas candeleras encima ha destacado "los valores de esta feria tradicional con una amplia oferta comercial y el gran ambiente social".
"En especial -ha añadido-, es punto de encuentro y de convivencia, importante para los barbastrenses. Es la última Candelera de esta legislatura pero es una mera coincidencia sin más".
En cambio ha sido la última detrás del mostrador para Blanca Arnal que cierra la Librería abierta por sus padres (Miguel y Carmen) hace 75 años en la calle Joaquín Costa.
Al lado de Fernando y de su hija Carmen han atendido al público "sensaciones especiales pero satisfechos y aunque estaremos hasta marzo, echaremos de menos el ambiente propio de los comerciantes. Termino esta etapa muy contenta por buenas experiencias vividas".
En la plaza del Mercado, ha habido propuesta conjunta de Aceites de Artasona, Cooperativa San Antonio, Ecostean, Aceites Ferrer y Aceites Noguero en la primera de las actividades organizadas por Comarca y Ceder Somontano para la promoción del sector durante febrero.
Además, se ha habilitado un espacio para la exposición de maquinaria agrícola. "Es una feria ideal para contactos y hemos hablado con mucha gente" explicó un concesionario de Huesca. Al final, el refranero dice que "si la Candelera plora, el invierno ya está fora". O sea, cerca.
