Carmen María Rodrigo, psicóloga de la AECC: "Un enfermo necesita información y poder expresar sus miedos"

HUESCA.- "Lo primero que necesita un enfermo de cáncer es información veraz porque la incertidumbre y el impacto emocional cuando se produce un diagnóstico de este tipo es muy grande. También tienen que poder expresar sus miedos, hay que dejarles que los manifiesten como desahogo emocional y permitirles llorar y estar enfadados o tristes".

Así lo puso este lunes de manifiesto Carmen María Rodrigo, psicóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) de Huesca, durante la charla Cómo ayudar a un enfermo oncológico, que impartió por la tarde en el Centro Ibercaja Huesca. En la cita ofreció una serie de pautas generales "porque cada paciente tiene unas características, una situación social y personal diferente", matizó.

La conferencia, enmarcada en la programación realizada por esta entidad con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer, "surgió de la necesidad de familiares y amigos del entorno de los pacientes que plantean a esta asociación cómo pueden ayudar a una persona que está pasando por un proceso oncológico", explicó.

Por otro lado, añadió, hay enfermos que en consulta muestran que la ayuda que reciben de sus allegados no les resulta eficaz del todo. Según la psicóloga, "una de las pautas más importantes es escuchar al paciente y preguntar, porque muchas veces presuponemos lo que el enfermo puede necesitar y damos por hecho cosas mientras quizá estamos haciendo lo que menos necesita".

Rodrigo incidió en la importancia que tiene para las personas afectadas por cáncer "el tener clara la información para que sepan a lo que se van a enfrentar, porque la incertidumbre genera muchos miedos".

Sobre el desahogo emocional manifestó que "es importante que los pacientes expresen sus emociones para que puedan ser adaptativas y le ayuden a enfrentar su situación. Además, debe tener el entorno social adecuado porque el impacto de un diagnóstico de cáncer no solo es para la persona sino también para toda la familia".

En este sentido, explicó que los miembros de una familia "deben reorganizarse según el papel que el enfermo juegue en ella e incluso pueden necesitar personas de ayuda".

En cuanto al respeto que hay que tener ante los enfermos afectados por un cáncer valoró que está relacionado sobre todo con el no presuponer ni dar por hecho esos "deberías". "No podemos decirle "tú lo que tienes que hacer es" o "lo que deberías hacer es" porque cada persona puede tener unas necesidades muy distintas a las de al lado", explicó.

Comentó que en la delegación oscense de la AECC también se presta una atención específica a los familiares de los enfermos. "La necesidad de los tres tipos de apoyo que ofrecemos (atención social, apoyo psicológico y acompañamiento) es tanto para enfermos como para familiares", explicó.

De hecho, indicó, que "hay estudios que demuestran que el impacto emocional ante un diagnóstico de cáncer es más fuerte en los familiares que en el propio enfermo", concluyó.

El ciclo de actividades previstas con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer finalizará este jueves en el Palacio Villahermosa, con la conferencia Todos vivimos con una bomba de relojería en nuestro cuerpo, impartida por Karel van Wely, investigador posdoctoral del Centro Nacional De Biotecnología. En la ponencia se explorará la vida de las células y se planteará cuánto trabajo cuesta reemplazar a las desgastadas y cómo se mantiene el organismo en buenas condiciones. La charla es gratuita y hay que inscribirse en la web de Ibercaja.