Sociedad

VULNERABILIDAD

El 13,4 % de los trabajadores en Aragón está en exclusión social

Los datos se recogen en un informe de Foessa impulsado por Cáritas

Cáritas atiende en Aragón a 23.927 personas en 2018, un 5 % menos
Cáritas atiende en Aragón a 23.927 personas en 2018, un 5 % menos
S.E.

ZARAGOZA.- El 13,4 por ciento de las personas que trabajan en Aragón se encuentra en situación de exclusión social, que abarca más aspectos que el económico y no pueden hacer frente al pago de suministros del hogar o de otros servicios básicos, y el 2,1 por ciento están en pobreza severa, según se desprende del informe de la Fundación Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada (Foessa), impulsado por Cáritas.

Asimismo, en la Comunidad autónoma se registra un 11,1 por ciento de trabajadores pobres, personas que aún teniendo trabajo tienen limitadas sus posibilidades de integración porque sus empleos son precarios, temporales, parciales y alternan ciclos cortos de empleo con otros de desempleo.

Estos datos, que atañen al indicador del empleo, revelan que la desigualdad en el mercado de trabajo está imponiendo el discurso de que el éxito final reside en la consideración del empleo como un "privilegio, no como un derecho, por lo que la precariedad laboral se ha convertido en una forma de vida estructural en la sociedad", ha señalado el sociólogo y coordinador de este informe, Guillermo Fernández.

El VIII Informe Foessa fue presentado este martes por el presidente de Cáritas Aragón, Carlos Sauras, y el sociólogo y coordinador del estudio en la sede de la entidad en Zaragoza.

Carlos Sauras sintetizó que la realidad de Aragón sobre el 2013 "está mejor" en líneas generales porque ha habido un aumento del empleo y la integración plena ha subido casi diez puntos en cinco años, pero la exclusión severa es similar a la de entonces y los afectados no consiguen salir.

"El informe es una radiografía muy completa de la situación social, es una foto fija no cuestionable de lo que está pasando, pero no quiere ser solo un cuadro sociológico que marca unas líneas de por dónde ir para erradicar la pobreza y luchar contra la exclusión".

En rueda de prensa, Guillermo Fernández subrayó que "lo que genera más desigualdad es no tener una red familiar y social" para alertar del avance progresivo de la destrucción de la clase media.

Otro dato sobre el que se detuvo es el número de personas en situación de inseguridad, unas 170.000, debido a que su colchón de resistencia es débil y serían los primeros que se incorporarían a la exclusión en caso de una desaceleración económica. "Están en la antesala de la exclusión e intuyen que su sostén económico quebrará en una próxima crisis", expuso Fernández.

Por el contrario, destacó que el 53 por ciento de personas de la sociedad integrada, que no tiene dificultades para su supervivencia, era de un 44 por ciento de 2013. Si a este grupo se suman las que se encuentran en una integración más precaria se llega al 80 por ciento de los aragoneses.

El estudio realizado por 500 personas, entre las que 130 son investigadores, y el resto, unos 350 profesionales de las encuestas, se basa en las consultas realizadas a más de 11.000 hogares en toda España, de los que 600 corresponden a Aragón.

SOCIEDAD ESTANCADA

Guillermo Fernández apuntó que de los 35 criterios aplicados a las encuestas se desprende que la exclusión social en Aragón es de 227.000 personas, el 17,4 por ciento, y constituye un colectivo estancado porque no pueden salir de esa situación social y desde 2013 solo se ha reducido en un 1,6 por ciento, 29.000 personas.

Dentro de este bloque hay un grupo especialmente vulnerable de unas 105.000 personas, el 8 por ciento, que están en situación de exclusión severa, frente al 7,8 por ciento que eran hace cinco años. Sobre ellos se ceba la desigualdad y la precariedad en sus diferentes formas, a lo que se añade su "invisibilidad para los partidos políticos".

Si se ahonda en este grupo se detecta un subgrupo, de 50.000 personas, que concentra la exclusión más dura porque los mecanismos de protección social les han fallado o no son capaces de llegar. "Son los expulsados de nuestro marco social".

Guillermo Fernández resumió que Aragón se caracteriza por una tendencia "dicotómica" durante la recuperación en la que conviven una mejora nítida de los niveles de integración y en los índices económicos aparejados a una reducción de la desigualdad, pero al mismo tiempo presenta un crecimiento de la exclusión severa, que no siente los efectos de la recuperación económica y de hecho, agrava sus condiciones de vida.

Por ello, alertó de que la encuesta pone de manifiesto la existencia de un cierto riesgo de cronificación de estas situaciones y de polarización de la estructura social al crecer el espacio de la integración plena y reducir claramente el espacio intermedio de la integración precaria, mientras se mantiene un amplio espacio de exclusión moderada, que son una de casa seis personas residentes en Aragón.

VIVIENDA

Otro indicador del estudio atañe a la vivienda que ocupa el primer lugar frente a la exclusión, por delante del empleo, y supondría el 62,1 por ciento de las personas en situación de exclusión. En concreto, en situación de vivienda insegura, que sería vivir temporalmente sin contrato de arrendamiento o bajo la amenaza de violencia o con notificación de desahucio, se encontrarían 11.000 hogares, el 2 por ciento, que serían unas 24.000 personas.

En situación de vivienda inadecuada, que sería un espacio que no reúne las condiciones adecuadas par la habitabilidad, como el hacinamiento o sin acceso a suministros, serían unos 42.000 hogares, el 8,1 por ciento, que representaría a unas 167.000 personas.

Guillermo Fernández avisó de que el mayor riesgo de exclusión social se concentra en hogares con menores, en los monoparentales y de familias numerosas. Por el contrario, indicó que "a más edad menos exclusión social porque un tercio de los PGE se destinan al pago de las pensiones".