Sociedad

NAVIDAD EN EL ALTO ARAGÓN

Huesca ilumina Etiopía gracias a la solidaridad de los oscenses

La oenegé Entarachén-Vols cierra el 5 de enero su campaña navideña

Huesca ilumina Etiopía gracias a la solidaridad de los oscenses
Huesca ilumina Etiopía gracias a la solidaridad de los oscenses
R.N.

HUESCA.- La oenegé oscense Entarachén-Vols sigue celebrando la Navidad con los oscenses y lo hace a través de la campaña Luces por Etiopía, que el día de Nochevieja, siguiendo la estela de Nochebuena y que repetirá este domingo 5 de enero, volvió a llenar la plaza Concepción Arenal de solidaridad y música.

La Coral Divertimento, que iba a ser la encargada de animar la última jornada del año, no pudo actuar. Sí lo harán el domingo la batucada Sambasianos (11:00 horas), y la Coral Santo Domingo, que dirige Laura Luque (12:00 horas).

Completando la estampa la carpa de Entarachén, en la que los voluntarios se encargan de su ya tradicional colecta, ofreciendo a quienes colaboran encender una luz por Etiopía y realizando una cuestación por los alrededores de la plaza que, por cierto, estaba muy animada con la celebración de la Nochevieja infantil en los Porches de Galicia.

Tampoco faltaron en el stand los calendarios solidarios con los que la oenegé trae hasta Huesca un pedacito de Etiopía, en este caso a través de fotografías.

Diseñado por Agustín Lorés para este 2020, y bajo el lema Somos Uno, el almanaque, de una manera atractiva y amena, propone una reflexión sobre la necesidad de brindar oportunidades educativas a todos los niños y niñas en todo el mundo.

Como en años anteriores, la campaña "Luces por Etiopía", de la que se cumple este año su décimo quinta edición, se desarrolla en favor del Centro Juvenil Don Bosco, un centro de día para niños de familias en situación de exclusión social situado en el barrio de Mekanissa, en la periferia de Addis Abeba, capital de Etiopía.

El Centro Juvenil Don Bosco, acoge en este curso 2019-2020 a más de 400 niños y niñas de familias vulnerables de este barrio de la periferia de Addis Abeba, a los que brinda alimentación, acceso a la educación y a la salud y apoyo psicosocial. Además, en línea con el espíritu salesiano que caracteriza el trabajo cotidiano en este espacio, ofrece actividades recreativas y de tiempo libre para centenares de chicos y chicas del barrio durante todo el año.

Desde Entarachén-Vols se recalca así la necesidad de un apoyo sostenido en el tiempo como medio eficaz para la construcción y desarrollo de proyectos de vida que supongan, verdaderamente, una oportunidad de futuro para los jóvenes y niños de Addis Abeba.