María Ángeles García Soto: "La escritura expresiva es muy liberadora, saca fuera miedos y angustias"

HUESCA.- Necesidad de ser cuidada cuando se cuida. La atención a personas con Alzheimer o con cualquier otra enfermedad que deje a una persona en situación de dependencia "precisa de tiempo para el descanso y desconectar de la enfermedad", explica Mª Ángeles García Soto, psicóloga, y facilitadora de sesiones de autoayuda para personas cuidadoras a cargo de pacientes con Alzheimer, que ha visto como, por la crisis sanitaria a causa del coronavirus, se cancelaban las dos sesiones -una charla y una reunión del grupo de autoayuda CuidaT, MueveT, QuiereT-.

Unos espacios para el encuentro que representan una oportunidad de combatir el síndrome de Burnout (o del quemado), un tipo de síndrome provocado por el estrés crónico continuado, que se da en el día a día al enfrentarse a la enfermedad de la persona cuidada, y que puede derivar en problemas de autoestima, depresión o ansiedad.

Una demanda -la que se realiza a la persona cuidadora- que es 24/7, de noches sin dormir, sin descanso, en estado de vigilia constante, que se ve aliviada por la asistencia que prestan los centros de día y atención a personas dependientes en los que las personas pacientes pasan una parte del día. Es ahí cuando "las cuidadoras tiene el tiempo libre para desconectar la enfermedad". Si ese tiempo para el autocuidado desaparece, los efectos en estas personas, "emocionalmente muy tocadas", se convierte en devastador, resulta alarmante para ellas "cuando cuentan con ese horario y, de repente, se lo quitan", explica García Soto, como puede suceder al cerrar los centros de día por la crisis del coronavirus. "Para ellos es muy alarmante, están preocupados por esa posibilidad", explica.

Precisamente sobre el cansancio y sobre percibir llevar una gran carga se centraba la charla del pasado jueves 12. Se buscaba, por un lado, identificar el tipo de carga que tienen las personas cuidadoras, a través de la escala Zarit, "para saber exactamente cómo están de cansados o quemados" y "valorado ese grado, qué es lo que tendrían que hacer". Por ejemplo, en cuadros de depresión o ansiedad, García Soto recomienda trabajar "mucho con los pensamientos. Son personas que le dan muchas vueltas a la cabeza. Inconscientemente, están pensando en negativo, piensan que no son capaces, que no pueden más, qué hasta cuándo puede durar esto".

Una técnica para lograr salir del enroque sería la de la escritura expresiva. "A veces piensan que hablar es sobrecargar a otras personas, que son repetitivos por hablar siempre de lo mismo y eso les produce bastante inquietud".

Una manera cómoda de verbalizar es la escritura expresiva. "Yo les recomiendo que hablen, que gestionen sus emociones porque lo que peor puede hacer es callar", por eso "poner nombre a las emociones, las causas, los efectos e intentar hacerlo durante 15 minutos, y es una técnica muy liberadora, que saca hacia afuera sus miedos y angustias".