Celedonio García Rodríguez: Perseverante y pasional con sus cosas

Celedonio García Rodríguez nació en Menasalbas (Toledo) en 1961. A los tres meses ya vivía en Albalate de Cinca, "donde di mis primeros pasos", y a los dos años fue a vivir a San Lorenzo del Flumen, donde transcurrió toda su infancia, pero reside desde hace más de cuatro décadas en Zaragoza.

De los años vividos en el pueblo monegrino rememora las aventuras de su infancia: "Fuimos de las primeras familias que llegamos allí y allí sigo vinculado, tenemos tierras y casa y vamos todos los fines de semana", dice confesando que fue un niño muy bueno. "Corríamos todo el día por el pueblo, haciendo carreras con los carros de mano y cargados de cántaros cuando íbamos a buscar agua a la fuente, lo que conllevaba caídas y rasguños por todas partes", narra considerando que llevaban una vida muy natural, que "hacíamos excursiones con los maestros todos los miércoles, entrábamos en cuevas y como coincidió con la "operación rescate", cuando en Curbe encontraron restos neolíticos, hacíamos de exploradores, hallábamos balas de la guerra, era una vida en plena naturaleza e incluso algo salvaje". Sobre aquellos juegos que repartían entre partidos de fútbol y guerrillas, dice: "Juegos algo brutales en los que hacíamos casetas y nos divertíamos a pedradas", si bien también debían ayudar en casa "con los animales, en el campo".

Como anécdota de alguna travesura más gorda, cuenta que "una vez cogimos melones de un campo y los tiramos por una colina, lo que provocó el enfado del hortelano" y, claro está, de los padres de aquellos niños que disfrutaban cada momento de su entorno.

Este licenciado en Geografía e Historia, ejerciendo de profesor de Educación Física e impartiendo docencia en la ciudad de Teruel, Calatayud, Utrillas, Zaragoza, Almazán, Sigüenza y Daroca, ha publicado muchos libros y cientos de artículos sobre temas aragoneses, la mayor parte en colaboración con José Antonio Adell, con quien coincidió disputando carreras pedestres.

Con una memoria envidiable, recuerda el primer pollo que disputó en su vida. "Fue en Castejón de Monegros en el año 1979. Me llevó Miguel Ángel Panivino. Era en un campo de fútbol en el que no había ni una sombra, un cubo de agua con la que nos refrescábamos, estaba todo el pueblo y había un gran nivel. Ganó Eleuterio Antón, segundo fue Abel Perau y tercero José Antonio Adell. Nos fuimos a las ocho y media de la mañana tras estar toda la noche de verbena".

Celedonio García tiene la capacidad de ser perseverante y pasional con sus investigaciones, sus libros y artículos, sin olvidar sus extraordinarias fotografías.

Es un hombre autoexigente con su trabajo y con la vida y, además, muy respetado en Los Monegros.