Mari Carmen Galindo: "Se están atendiendo muchas consultas de personas con TCA"

GRAUS.- Cuando comer es una de las pocas cosas permitidas por el confinamiento y la obsesión por la comida es una enfermedad, la situación actual -difícil para todos- resulta insoportable para las personas con Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).

Mari Carmen Galindo, presidenta de la Federación Española de Asociaciones de ayuda y lucha contra la Anorexia y Bulimia Nerviosas (Feacap) y vicepresidenta de la Asociación Aragonesa (Arbada), anima a pacientes y familias a seguir las recomendaciones médicas, pedir ayuda a colectivos especializados y tener "mucha paciencia".

"Con sus trastornos y sin poder seguir sus rutinas para vencer la enfermedad o seguir adelante, esto les rompe, les genera angustia, presión y ansiedad".

Este encierro forzoso les dificulta poder aislarse, hace que se sientan vigilados e impide compartir su situación en determinados entornos o llevar a cabo sus rutinas de ejercicio. "Tanto a ellos como a las familias nos cuesta mantener el equilibrio. Hay que cultivar la paciencia y pensar que ellos están mal y tú también, así que debemos ser más comprensivos y relajar la situación". Para ello, Galindo considera fundamental seguir las recomendaciones médicas.

A través de las redes sociales, Arbada traslada los consejos de los especialistas médicos en conducta alimentaria del Hospital Clínico de Zaragoza. "Este es un hecho extraordinario para todos -explica- y hay que mantener las medidas higiénicas y de distanciamiento social recomendadas, seguir los horarios habituales de sueño y mantener las cuatro o cinco comidas normales porque estar confinado no implica una ganancia de peso. Tienen miedo a engordar y tienden a restringir la comida", indica la presidenta de la Feacap, abogando por la dieta mediterránea y algo de ejercicio. También es recomendable continuar con las rutinas escolares o laborales y distraerse.

Ante situaciones de alarma, Arbada mantiene la atención de forma telefónica y "online", en el teléfono 976389575, porque es mejor no ir al médico. "Vamos a intentar cuidarnos para no tener que ir al hospital. En este momento, todos somos agentes de salud", asegura Galindo, mientras comenta que "se están ateniendo muchas consultas de apoyo a personas que lo están necesitando".

Aunque cada vez hay más hombres, las mujeres siguen siendo mayoritarias en los TCA. "Es una enfermedad multicausal relacionada con las emociones. Les cuesta ser flexibles, adaptarse y canalizar su hipersensibilidad. No pueden minimizar o relativizar, lo llevan al grado sumo y una mínima cosa les hace sufrir mucho".

Aún así, concluye con un mensaje positivo porque la mayoría se curan. "Hacemos mucha prevención primaria en las escuelas, pero también secundaria para prevenir que se alargue cuando ya se está enfermo y terciaria, para que el paciente mantenga una calidad de vida mejor, dentro de la enfermedad", resume.