Sociedad

LA ENTREVISTA

Ana Salvador: "Me gusta ascender por montañas vírgenes, lejos de las estaciones"

La esquiadora de Biescas practica el splitboard, snowboard de travesía

Ana Salvador: "Me gusta ascender por montañas vírgenes, lejos de las estaciones"
Ana Salvador: "Me gusta ascender por montañas vírgenes, lejos de las estaciones"
EVASION TV

SABIÑÁNIGO.- Ana Salvador, de Biescas, aprendió a esquiar cuando tenía cinco años y, desde entonces, la nieve ha formado parte de su vida. Le gusta el riesgo y la libertad de la montaña.

Ahora practica el splitboard, snowboard de travesía, "para poder ascender por montañas vírgenes lejos de las estaciones de esquí", explica.

Se había preparado a fondo para desarrollar su proyecto "6000 Split" que comenzó hace dos años y en abril tenía que viajar a Bolivia. "Quería participar en una expedición a dos montañas, pero como es lógico, la pandemia me lo impidió y la tuve que anular forzosamente. Para mí ha sido un duro golpe porque era la segunda vez que se anulaba. Lo intente hacer el año pasado, pero tuve un accidente, y este 2020 estaba convencida de que en primavera se iba a llevar a cabo, lo tenía todo a mi favor, me había recuperado bien, llevaba buenos entrenos en el Pirineo, y no imaginaba que una pandemia haría que anulara por segunda vez".

Pero no ha bajado la guardia y sigue entrenando. "Al principio lo he llevado bastante bien, he hecho cosas para las que antes no tenía tiempo, pero ya ha pasado demasiado como para ponerle buena cara a esto. Hay días que estoy más animada, más motivada, y otros en los que te paras un poquito a pensar. Después de tanto tiempo he echado de menos dar un paseo porque necesitamos salir, la luz del sol y respirar un poco de aire fresco en el exterior, ahora ya se puede salir, y esto ya es otra cosa".

Argumenta que los entrenamientos del invierno le han ayudado a salvar esta cuarentena "y a estar activa en casa de la manera que sea. Yo utilizo el Pirineo, la montaña en general, para entrenar por medio de actividades como puede ser el splitboard, que es mi deporte principal, snowboard, escalar, correr por la montaña, y además, hacía también un par de días de gimnasio para fortalecer. Ahora, al estar en confinamiento y no poder hacer estas actividades, organizo mis entrenamientos en casa".

Cada día se programa dos entrenos, uno a las diez de la mañana y otro a las seis de la tarde, y después de este último, le dedica una hora al yoga, "que aprovecho para estirar, coger equilibrio y fortalecer". Y todo con la intención de poder un día viajar a Bolivia para participar en la expedición que tenía planeada.